Sánchez avala el ascenso del general Espejo porque «no ha sido imputado ni condenado» por el caso Zabalza

Sánchez ha respondido que sobre este caso «se han llevado a cabo acciones judiciales concretas sin que el general Espejo resultara nunca imputado ni mucho menos condenado».

La polémica ha surgido tras el ascenso del teniente general de la Guardia Civil Arturo Espejo, presuntamente vinculado con el caso de Mikel Zabalza, que apareció muerto, esposado y flotando en aguas del río Bidasoa el 15 de diciembre de 1985, veinte días después de ser detenido por agentes del instituto armado.

En su pregunta a Pedro Sánchez, el portavoz del PNV se refiere a las declaraciones de Andueza, en una entrevista radiofónica, en la que trasladó a la familia del joven de Orbaizeta que sentía «mucha indignación y mucha vergüenza» por el citado ascenso de Espejo y que esperaba «poder decírselo a la cara, en algún momento, a la familia de Mikel Zabalza».

Esteban le ha afeado al presidente en su turno de réplica que «ni los suyos le entienden –en referencia al PSE–. No se dan cuenta de lo paradigmático que es este caso para Euskadi. Una persona que no era de ETA, que desaparece de una comisaría y dicen que se ha ahogado en un río intentando huir, cuando los peritos señalan que es imposible». Esteban ha añadido que «nadie vio el dispositivo de búsqueda de la Guardia Civil y hay audios de Perote con Gómez Nieto reconociendo que podía haberse quedado muerto por torturas en el cuartel».

El portavoz jeltzale ha subrayado que el caso «se cerró en falso porque no se quieren aportar pruebas. Está bajo secreto. Y nos encontramos con que Marlaska le asciende y le da una responsabilidad de confianza. Les pedimos que levanten el secreto sobre el caso Zabalza y retiren las responsabilidades de confianza a este persona».

En su turno de respuesta el presidente ha reiterado que «no existe una resolución judicial concreta en la que se haya imputado a Espejo y en un Estado de Derecho sin ésta no puede haber condena».

Sánchez ha concluido resaltando que «en este país se ha luchado con contundencia para perseguir la guerra sucia contra ETA. Esto es público y notorio. No es de recibo pretender empañar el buen hacer de los fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y poner en cuestión nuestro Estado de derecho. Yo nunca utilizaré el drama del terrorismo para dividir a la sociedad, otros sí lo han hecho. Se han cumplido cinco años desde la desaparición de ETA, se la derrotó y ahí estuvimos los vascos y el resto de los españoles, así como las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y la Justicia. Ha sido uno de los acontecimientos más destacados de nuestra historia democrática».