Narciso Michavila: «Cada paso que Sánchez ha dado desde el 28-A confirma que vamos a elecciones»

-¿Vamos hacia nuevas elecciones o todavía ve posible un pacto de investidura en el último momento?

-Imposible el pacto no es, pero yo estoy convencidísimo de que vamos a una repetición de las elecciones, porque cada uno de los pasos que ha ido dando el Gobierno de Pedro Sánchez desde las elecciones del 28 de abril han ido confirmando los pasos anteriores. Su estrategia desde el inicio es ir de nuevo a las urnas.

-¿No ve ninguna intención de desbloquear la situación en los últimos movimientos del PSOE?

-Para mí confirman que está en campaña electoral desde la misma noche del 28-A. Un candidato que busca formar gobierno no retrasa ocho semanas su investidura. Se retrasó precisamente para que las elecciones tocaran un 10 de noviembre, de forma que haya consumo televisivo alto y garantizar así que no baje la participación. En una repetición electoral siempre existe el riesgo de un descenso en la participación, por lo que la estrategia del Gobierno ha sido una campaña electoral permanente, como demuestra el hecho de que este Ejecutivo ha hecho en un año más encuestas de intención de voto que los gobiernos anteriores en una legislatura completa. El Gobierno está en funciones, pero la maquinaria del voto, del CIS al servicio de Moncloa, no ha parado. No es casualidad que Sánchez eligiese como jefe de gabinete a un estratega electoral como Iván Redondo. Está buscando campaña electoral y lo que me asombra es que la gente aún no lo vea.

-¿No ve entonces un resquicio para evitar la repetición electoral?

-Es que todo lo que se ha ido haciendo desde el 28-A confirma que vamos a elecciones. Si quieres formar gobierno, no dejas para las últimas 48 horas el sentarte con tu principal socio. En esta especie de serie en la que han convertido la falta de investidura, cada capítulo confirma el anterior y además te explica muchas claves de lo sucedido anteriormente. Sánchez va a por las elecciones del 10 de noviembre de cabeza.

-Según los análisis que maneja, ¿la estrategia podría salirle bien?

-Sí, porque mientras exista Vox, gobernará la izquierda. A Sánchez le interesa que se hable de Vox y, en la medida en que la derecha esté fragmentada, el PSOE tendrá garantizado el Gobierno. Además, con las encuestas que tenemos nosotros, le va a ir muy bien.

-¿La repetición de las elecciones no puede provocar un castigo hacia aquel partido que los ciudadanos identifiquen como culpable?

-Podría ser inicialmente, pero los partidos saben que, cuando llega el momento de votar, a la gente le tiemblan las piernas y una mayoría acaba votando a los suyos, aunque solo sea para que no lleguen al poder 'los otros'. Sánchez juega con esa ventaja, y por eso tampoco ha tratado de tender puentes con Ciudadanos o el PP para una abstención. Al contrario, ha dinamitado cualquier puente.

-¿La estrategia de Sánchez podría pasar también por que partidos como Podemos acaben apoyándole en el último momento por temor a otras elecciones?

-No creo, porque si de verdad hubiese buscado alianzas con Podemos, habría hecho lo mismo que el PSOE en todas las comunidades autónomas donde ha firmado acuerdos de coalición. Ha habido más negociación de cara a las televisiones que sentarse a negociar de verdad.

-¿Pero Podemos podría renunciar a sus aspiraciones solo por evitar nuevas elecciones que le penalicen?

-Podemos es consciente de que puede bajar un poco, pero al final Sánchez seguiría dependiendo de Pablo Iglesias para gobernar. Más tarde o más temprano, va a tener que ceder a un Gobierno de coalición con Podemos, salvo que durante la próxima campaña Sánchez diera un giro en su estrategia para buscar la abstención de Cs o el PP. Un poco como hizo Rajoy tras la repetición electoral de 2016. Pero para eso tendría que ir preparando al electorado.

-¿Unas nuevas elecciones depararían cambios relevantes en los actuales bloques del Congreso?

-Ninguno de los dos bloques por sí solo sumará mayoría absoluta. El de PP, Cs y Vox no alcanzará seguro la mayoría absoluta mientras sean tres marcas, pero mis encuestas tampoco dan que PSOE y Podemos la alcancen por sí solos. Seguirían dependiendo de los grupos nacionalistas.

-Entonces, ¿la distancia entre ambos bloques será similar?

-Probablemente el bloque de izquierdas suba un poco. El de derechas bajará porque Vox pierde fuelle.

-¿La coalición 'España Suma' sería beneficiosa para el centro derecha?

-Todos los ejemplos de fusión de partidos demuestran que nunca se suma 'uno más uno, igual a dos'. Lo vimos con la coalición entre Podemos e IU. El sistema electoral español castiga mucho la división de los espacios electorales, pero ir de la mano de Vox castiga todavía más. Yo creo que el 'España Suma' no suma tanto.

-Si al final cada partido concurre con sus siglas, ¿unas nuevas elecciones podrían reforzar el bipartidismo clásico de PSOE y PP?

-Sí. Hay dos tendencias bastante claras: la primera es que bajaría la participación sin hundirse y, la segunda, que subiría el bipartidismo, pero sin dispararse. El PP recuperaría algo, pero se quedaría muy lejos del PSOE.

-¿Todo esto es política ficción o se sustenta en datos?

-Sí, sí, son datos. Con las encuestas que tenemos entre manos se ve claro un PSOE fuerte, una participación que baja mucho, un PP que recupera un poco y un bloque de izquierdas que sigue necesitando de los nacionalistas para gobernar.

-¿Esas encuestas tienen en cuenta el enfado de la ciudadanía si vuelve a ser convocada a las urnas?

-Ahora mismo, la línea que más está subiendo, con diferencia, es la de 'no iré a votar' o 'votaré en blanco'. Pero cuando llegue el momento, la participación bajará pero no se hundirá.

-Entonces, ¿ese enfado no provocaría grandes vuelcos?

-Las encuestas hechas antes de que se convoquen las elecciones hay que mirarlas con prudencia... Hasta que no se confirme no podremos saber cómo digiere el electorado que el Gobierno le vuelva a llevar a las urnas.

-¿No es una perversión del sistema democrático que en cuatro años pueda haber cuatro elecciones?

-Absolutamente. ¡Es que vamos a elección por año! Es indignante que una herramienta como el CIS se haya pervertido para poder decidir cuándo me interesa ir a elecciones.

-¿Hay riesgo de que se extienda un desencanto hacia la política?

-Habrá que verlo, pero está todo tan fragmentado que al final ves que Rajoy gobernó con el apoyo de un 20% del electorado, y Sánchez parecido. Si no llegas a pactos, es imposible gobernar. Y los nuevos partidos, tanto Podemos como Cs, tienen clarísimo que ellos no van a seguir en el banquillo. O se implican en los gobiernos o no van a apoyar gratis. Pretender que no haya coaliciones cuando casi todas las autonomías las tienen es irreal. Veo muy difícil que España no tenga un Gobierno de coalición la próxima legislatura.