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Alfonso Alonso (PP) interviene en el pleno de control del Parlamento de ayer ante el lehendakari, Iñigo Urkullu, y Joseba Egibar (PNV). I. AIZPURU
El Gobierno Vasco rechaza retirar los vídeos sobre ETA, aunque estudiará las aportaciones

El Gobierno Vasco rechaza retirar los vídeos sobre ETA, aunque estudiará las aportaciones

Fuentes cercanas a Urkullu reconocen su malestar por la polémica sobre la unidad didáctica, aunque no dudan de que «deslegitima la violencia». El lehendakari elude contestar a la exigencia del PP para que destituya a Jonan Fernández

MIGUEL VILLAMERIEL

SAN SEBASTIÁN.

Jueves, 1 de enero 1970

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La polémica generada en torno a la elaboración de una unidad didáctica sobre la historia de ETA por parte de la Secretaría General de Derechos Humanos y Convivencia del Gobierno Vasco ha disgustado al lehendakari, Iñigo Urkullu, aunque no ha cambiado su convicción de que el material educativo que se llevará a las aulas se basa en una clara «deslegitimación de la violencia». Por lo tanto, ni los vídeos serán retirados de forma fulminante ni el responsable de Derechos Humanos, Jonan Fernández, será destituido de su cargo, como ayer exigió directamente el PP vasco. Fuentes de Lehendakaritza aclararon, no obstante, que aún hay seis semanas de plazo para que los partidos y las asociaciones de víctimas presenten sus aportaciones a la iniciativa educativa Herenegun!, por lo que trataron de rebajar la tensión asegurando que todas las correcciones que se presenten serán estudiadas y valoradas.

El pasado jueves, todas las asociaciones de víctimas del terrorismo, al unísono, exigieron a Urkullu la retirada inmediata de los cinco vídeos de veinte minutos cada uno que relatan las últimas décadas de historia vasca que, a su juicio, «alimentan el mito del conflicto en un claro intento de blanquear la actividad terrorista» de ETA. Está previsto que esta unidad didáctica llegue a ocho centros educativos el próximo abril, aunque aún se mantiene abierto un periodo de presentación pública para recibir aportaciones. Esta iniciativa ha sido impulsada por la Secretaría General de Derechos Humanos y Convivencia, por lo que su responsable, Jonan Fernández, ha tratado de dar todas las explicaciones posibles en los últimos días y ha asegurado que los testimonios recogidos en los vídeos «en absoluto justifican el terrorismo» ni «legitiman la violencia».

Estas explicaciones, sin embargo, no han tranquilizado a las asociaciones de víctimas, que insisten en la retirada de la unidad didáctica. El PP vasco fue ayer un paso más allá y reclamó al lehendakari en el pleno de control del Parlamento que «retire» su confianza en Fernández, lo que equivale a exigir su cese.

«Ya no le pido que retire los vídeos, le pido que retire a la persona de su confianza que está haciendo eso»

Alfonso Alonso, Presidente del PP vasco

«Todo se puede mejorar, pero que nadie piense que la intención es blanquear a ETA. Es justo la contraria»

Jonan Fernández, Secretario de Derechos Humanos

Hasta el momento, Urkullu ha mantenido silencio público sobre la polémica suscitada en torno a la iniciativa Herenegun!, aunque fuentes cercanas al lehendakari reconocen que todo el ruido que se ha generado, «evidentemente, no le gusta nada». A pesar de esta constatación, Urkullu se ha mostrado «absolutamente tranquilo» respecto al objetivo que persigue este material educativo, «que no es otro que la deslegitimación total de la violencia». «No tiene duda de que era necesaria una iniciativa de este tipo para llevar a las aulas la historia reciente de Euskadi y dejar claro a las nuevas generaciones que matar estuvo mal», aseguran las mismas fuentes. También recordaron que aún está abierto el periodo de aportaciones a la iniciativa y que «el Gobierno Vasco estudiará todas las que se presenten».

Silencio en el Parlamento

El lehendakari no se pronunció sobre este tema ni siquiera cuando el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, le pidió ayer en el pleno de control del Parlamento que cesara a Jonan Fernández. Aunque el PSE ha anunciado que presentará aportaciones para tratar de corregir algunas cuestiones de la unidad didáctica, el PP se ha erigido en la voz más crítica contra los vídeos sobre ETA, por lo que Alonso no desperdició su intervención de ayer en la Cámara para echárselo en cara a Urkullu.

La pregunta del líder del PP al lehendakari estaba enfocada a los Presupuestos pero, al final de su intervención, Alonso unió los acuerdos del PNV con EH Bildu sobre el nuevo estatus político para Euskadi con la polémica sobre Herenegun! y exigió a Urkullu que «no solo retire los vídeos sobre ETA, sino que retire también a la persona de su confianza que está haciendo eso», en referencia al secretario general de Derechos Humanos. El lehendakari eludió responder a este último punto y se limitó a replicar sobre los Presupuestos sin hacer ninguna referencia a los vídeos sobre ETA.

Alonso reprochó a Urkullu que su Gobierno se plantee aprobar las Cuentas vascas gracias al apoyo de EH Bildu y advirtió que esa coalición «vive en un callejón y usted va hacia él constantemente». Tras denunciar el pacto sobre las bases del nuevo estatus alcanzado por el PNV y la coalición soberanista, el líder popular denunció que «ahora también se van a llevar las tesis de Bildu a las escuelas. ¿Van a marcar ellos el paso de su Gobierno?». Fue en ese momento cuando Alonso le pidió que «retire» la confianza en Jonan Fernández «porque es un riesgo para la memoria y la convivencia».

Seis semanas de plazo

El secretario general de Derechos Humanos trató de tranquilizar ayer a los partidos críticos con la unidad didáctica, así como a las asociaciones de víctimas, al recordar que el material se ha enviado a los grupos parlamentarios y a otras partes interesadas y se ha abierto un plazo de seis semanas para recoger aportaciones. Fernández apuntó también que ha pedido su comparecencia en la comisión de Educación del Parlamento, junto con la viceconsejera de Educación, para «dar cuenta de todo». «Cuando recibamos todas las aportaciones y escuchemos todas las consideraciones, haremos una valoración de cuál es la situación y qué podemos hacer», apuntó.

Reconoció que «todo es mejorable», pero apuntó que «no podemos aceptar que alguien piense que el Gobierno Vasco o las personas que han intervenido en la elaboración de este material lo han hecho con la intención de blanquear el terrorismo de ETA. La intención es exactamente la contraria».

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