Reunión el 20 de marzo de la comisión consultiva de Emakunde en la que se debatió proponer el 5 de noviembre de 2024 como día festivo.

Euskadi se enreda en la festividad feminista

Colisión. La consejera Idoia Mendia sigue con el trámite para que el 8 de marzo de 2024 no sea laborable, fecha que rechaza Emakunde, que propone el 5 de noviembre

Fernando Segura

San Sebastián

Viernes, 7 de abril 2023, 02:00

El año que viene Euskadi contará con una festividad feminista, pero se desconoce la fecha concreta de la celebración. Existen dos propuestas sobre la mesa, ... la de la consejera de Trabajo, Idoia Mendia, que defiende que sea el 8 de marzo, aprovechando que es el Día de la Mujer; y la que plantea Emakunde, el 5 de noviembre, que conmemoraría que esa jornada de 1933 fue la primera vez que las mujeres vascas votaron. De momento, sigue adelante la propuesta del 8 marzo al haber sido rechazada la del 5 de noviembre por la dirección de Trabajo del Gobierno Vasco.

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La génesis del enredo arrancó el 22 de febrero, cuando Mendia anunció por sorpresa en el cierre de unas jornadas celebradas en Vitoria su intención de que el Día de la Mujer de 2024 sea festivo. La consejera explicó que la propuesta se incluirá en el procedimiento que sigue la dirección de Trabajo para elaborar el calendario anual.

El anuncio de la consejera socialista pilló a contrapié tanto a su socio de gobierno, el PNV, como a Emakunde. De hecho, la directora del Instituto Vasco de la Mujer, Miren Elgerresta, mostró el 27 de febrero su «sorpresa» porque, como subrayó, es una cuestión que necesita concitar una adhesión amplia de la sociedad, lo que implica contar con Emakunde y con el movimiento feminista.

Emakunde

Considera que declarar festivo el 8 de marzo podría frenar el carácter reivindicativo de esa fecha

Los jeltzales se mantuvieron en un discreto segundo plano, dado que el calendario laboral es una competencia de la consejería de Mendía. De hecho, PNV y PSE fueron al pleno del Parlamento Vasco del 2 de marzo con los deberes hechos para no mostrar fisuras. En esa sesión se planteó el debate sobre la festividad motivado por una proposición no de ley presentada por Podemos, transaccionada como enmienda con EH Bildu. La duda radicaba en si el PNV apoyaría o no la iniciativa. No fue así. Los dos partidos que conforman el Gobierno Vasco presentaron una enmienda a la totalidad en la que si bien se dio luz verde a que se incorpore el festivo, a su vez se dejó abierta la fecha para que sea acordada con Emakunde y las asociaciones feministas.

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Los jeltzales dejaron clara su postura por boca de Maitane Ipiñazar, quien calificó de «totalmente lícita» la iniciativa, dado que entra dentro de las competencias de la consejera. Ipiñazar, eso sí, puntualizó que «este proceso necesita una parada para escuchar a los agentes implicados».

En cumplimiento de este acuerdo parlamentario, el plenario de la comisión consultiva de Emakunde , órgano de participación de las asociaciones de mujeres de Euskadi y del propio Instituto Vasco de la Mujer, se reunió el 31 de marzo para abordar la cuestión. El resultado fue proponer por unanimidad el 5 de noviembre como la fecha más idónea. Las asociaciones también mostraron sus preferencias por el 18 de febrero (en 2005 se aprobó la Ley de Igualdad) y el 4 de septiembre (en 1995 se celebró la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer en Pekín). Sin embargo, finalmente se optó por el 5 de noviembre debido a que, como se ha señalado anteriormente, ese día de 1933 las mujeres vascas se estrenaron en las urnas. Emakunde recuerda que lo hicieron «con una votación propia, la del Estatuto de Gernika, y en masa, según los documentos de la época». Por el contrario, el organismo indica que declarar festivo el 8 de marzo podría suponer un freno a su carácter reivindicativo.

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«Fecha arriesgada»

El acuerdo no cuenta con el apoyo de la dirección de Trabajo. Este organismo comunicó el 31 de marzo que continuaba con el procedimiento para que la festividad sea el 8 de marzo, una fecha que reconoce que cuenta con la «oposición» de Emakunde, pero no de otras instituciones.

En relación al 8 de marzo, la citada dirección señala que el informe remitido por el instituto «descarta entrar a valorar siquiera ese día dado que 'pudiera considerarse que la fecha es arriesgada porque pudiera llegar a detener más que impulsar la consecución de estos propósitos –reivindicativos– y disgregar más que aunar esfuerzos', expresión que denota una posición no concluyente al respecto» Asimismo, añade que Emakunde plantea fechas alternativas sobre las que el propio instituto reconoce que son «una primera aproximación, ya que se trata de un proceso incompleto, vivo y ampliable».

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Dirección de Trabajo

Señala que Emakunde ha decidido descartar la fecha propuesta por Mendia sin argumentarlo

En conclusión, la dirección de Trabajo indica que existen alegaciones que no objetan el 8 de marzo y, por otro lado, las de Emakunde, «que decide descartar esa fecha sin argumentarlo y reconoce además que no es completa la reflexión con las asociaciones feministas». Por tanto, todo indica que Mendia elevará al Consejo de Gobierno que el Día de la Mujer de 2024 sea festivo, en contra del criterio de Emakunde y de las asociaciones de mujeres representadas en la comisión consultiva.

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