Aprobados los presupuestos de Gipuzkoa con el rechazo de EH Bildu y Podemos, y la abstención del PP

Las Juntas Generales de Gipuzkoa han dado luz verde a los presupuestos de Gipuzkoa para 2020, los primeros de la legislatura, con el apoyo de PNV y PSE, la abstención del PP y el rechazo de EH Bildu y Elkarrekin Podemos, que han afeado al gobierno foral la falta de colaboración con la oposición.

El ejecutivo foral, que conforman jeltzales y socialistas y que cuenta con mayoría en la Cámara de Gipuzkoa, ha logrado sacar así adelante su proyecto de presupuestos que prevé un gasto de 915,2 millones de euros, un 4,53 % más que este año y se convierte en el segundo de mayor cuantía en la historia del territorio tras el de 2009.

De esta manera, el pleno monográfico de este viernes en las Juntas Generales de Gipuzkoa se ha celebrado según lo previsto después de que hace diez días fueran rechazadas las enmiendas a la totalidad que habían presentado a estas cuentas tanto EH Bildu como Podemos. Estos dos grupos junteros se habían reservado también para hoy algunas enmiendas, que han vuelto a ser rechazadas tras el debate parlamentario en el que ambos grupos de la oposición han criticado la posición del gobierno foral.

El portavoz de EH Bildu, Juan Karlos Izagirre, ha acusado al ejecutivo de aplicar el «rodillo político» para aprobar su documento económico sin «ninguna voluntad de acordar con la oposición» y ha defendido las enmiendas presentadas por su formación encaminadas a mejorar unos presupuestos que «no son buenos para Gipuzkoa».

Las representantes de Elkarrekin Podemos, María Valiente y Arantxa González, quienes se han repartido el tiempo de intervención, también han rechazado las cuentas aprobadas y han subrayado la «viabilidad» de las propuestas planteadas por su grupo, que pedían planes de empleo con perspectiva de género, mejoras para trabajadoras de residencias o medidas contra el cambio climático.

La opinión de estos grupos ha sido rebatida por la procuradora del PNV María Eugenia Arrizabalaga, quien ha afirmado que el presupuesto es «bueno, equilibrado y eficaz», tiene en cuenta las políticas públicas y los retos de futuro, hace «un esfuerzo importante» en liquidar deuda y tiene la vocación de responder a los problemas ciudadanos.

La juntera socialista Susana García Chueca también ha defendido unas cuentas «netamente sociales, redistributivas y justas, pensadas para las personas y también para el progreso de Gipuzkoa en términos socioeconómicos, de sostenibilidad y de convivencia democrática».

El portavoz del PP, Juan Carlos Cano, ha criticado la falta de «ambición colaborativa» en la elaboración de estos presupuestos y ha sugerido al diputado general, Markel Olano, que el próximo año se reúna con la oposición antes de tener ya elaborada toda la propuesta presupuestaria si realmente apuesta por la gobernanza colaborativa.

El presupuesto propio de la Diputación de Gipuzkoa para 2020 incluye un gasto de 915,2 millones de euros, un 4,53 % más que este año, de los cuales 51 corresponden a la carga financiera y 863,6 millones al presupuesto de gestión que se distribuye entre los diferentes departamentos.

Las políticas sociales vuelven a absorber casi la mitad del gasto, ya que el departamento contará con 399 millones, aunque a esta cantidad hay que sumar otras partidas destinadas al centro de envejecimiento Adinberri o al programa Elkar-EKIN Lanea, ligadas directamente con este ámbito, en el que la inversión por habitante alcanza el récord de 566 euros, según cifras aportadas por la Diputación de Gipuzkoa, que estrenará el año con presupuestos.

El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, ha dicho que los presupuestos del territorio para 2020 permitirán dar un salto cualitativo en la lucha contra las desigualdades y empezar a materializar los proyectos más importantes de esta legislatura.

Olano ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación al término del pleno presupuestario celebrado en las Juntas. Ha calificado de «hito muy importante« la aprobación de unos presupuestos »muy sociales« e »inversores«, que permitirán comenzar a materializar iniciativas estratégicas como el centro de envejecimiento Adinberri y el de electromovilidad Mubil o el plan de empleo Elkar-Ekin.

Olano ha dicho que las cuentas tienen tres ejes principales: responder a las necesidades sociales, con una inversión de más de 400 millones en política social; apostar por los sectores económicos de futuro, con 22 millones destinados a las iniciativas de Etorkizuna Eraikiz, y reducir la deuda en otros 45 millones de euros en 2020.

«Se trata de un presupuesto muy potente, inversor y social, reflejo de nuestra gestión política, y nuestra principal herramienta para construir esa Gipuzkoa con los menores niveles de desigualdad sociales, de género y lingüísticas posibles», ha defendido.

Olano ha subrayado que la actitud del gobierno foral en la negociación presupuestaria con los grupos de la oposición ha sido «abierta y proclive al diálogo», aunque «respetando siempre el espíritu del proyecto que presentó la Diputación». Ha indicado que los presupuestos aprobados incluyen un total de 47 enmiendas que han sido acordadas con el PP, EH Bildu y Elkarrekin Gipuzkoa, por un total de 832.000 euros.

Con la formación popular se han transaccionado un total de 14 enmiendas, por un valor de 155.000 euros; con EH Bildu, se han acordado 16 propuestas, con un peso de 375.000 euros; y de Elkarrekin Gipuzkoa, por último, se han aprobado 17 enmiendas, por un total de 302.000 euros, ha subrayado.

El diputado general también ha hecho hincapié en la transversalidad del presupuesto enmarcada en su «modelo de gobernanza abierta y colaborativa» de manera que los principales proyectos no se limitan a un solo departamento sino que están repartidos entre diversas áreas.

Por último, Olano ha vuelto a hacer hincapié en la importancia de la economía ya que, según ha afirmado, «la fortaleza que muestra Gipuzkoa en este ámbito permite a la Diputación dotarse de más recursos para llevar a cabo sus políticas».