Covite considera «irresponsable» la retirada de placas de víctimas en Donostia y Bilbao

Covite calificó ayer de «irresponsable» la retirada de las 62 placas colocadas por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo el pasado sábado en San Sebastián y Bilbao en memoria de 82 personas asesinadas por ETA, la Triple A y los GAL. La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, lamentó que los alcaldes Eneko Goia y Juan María Aburto «sean tan escrupulosos con la ley para aplicarla contra las víctimas y su memoria», y sin embargo «consientan homenajes a etarras en sus calles».

Covite se referió con estas palabras a la respuesta municipal a la última iniciativa de su campaña 'Una víctima, una placa', que el colectivo comenzó en 2014 en Bilbao y que extendió posteriormente a San Sebastián y a Errenteria. En la madrugada del pasado sábado, miembros de la asociación, incluidos los hijos de Gregorio Ordóñez y Ángel Pascual, colocaron 62 rótulos para recordar los lugares donde el terrorismo acabó con la vida de 82 personas. Consuelo Ordóñez lamenta, asimismo, que los alcaldes de ambas capitales «evitan cumplir sus compromisos» de colocar las citadas placas de recuerdo y que «apenas tardaron unas horas en ordenar su retirada».

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo anunció también que ha enviado cartas a once ayuntamientos navarros reclamando la colocación de placas para recordar a 42 víctimas del terrorismo asesinadas en esos municipios. Las misivas informan sobre los asesinatos cometidos en cada localidad y piden por vía administrativa que los consistorios accedan a colocar los rótulos. De acuerdo con la petición, al Ayuntamiento de Pamplona le correspondería recordar a 27 asesinados. A él se unirían los ayuntamientos de Leitza, donde ETA cometió tres asesinatos, y los de Sangüesa, Estella y Goizueta, con dos cada una. También se han enviado misivas a Endarlaza, Etxarri-Aranatz, Berriozar, Lumbier, Alsasua y Burguete.