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Nagua Alba posa sonriente, ayer en una cafetería de su barrio de Benta Berri.

Nagua Alba: «Queremos tener grupo propio en el Congreso como En Comú y Marea»

«El PNV se ha equivocado dos veces. En diciembre nos subestimaron y ahora nos han faltado al respeto», afirma

ELISA LÓPEZ

Martes, 28 de junio 2016, 06:53

Exhausta pero feliz tras ganar el domingo las elecciones en Euskadi y en plena resaca electoral, Nagua Alba llega sonriente a la cita con este periódico en su barrio de Benta Berri. Dice que es una afortunada porque cuando le paran por la calle «siempre es de manera amable y para felicitarme». Y es que las cosas no podían ir mejor a su partido. Aunque reconoce que la sensación es agridulce después del batacazo de Podemos en España. Una de cal y otra de arena. Pero la secretaria general vasca de la formación morada es disciplinada y no pierde el tiempo. Desde hoy se meterá de lleno con su equipo a preparar las autonómicas. ¿Y vacaciones? «Ahora no hay tiempo para eso», responde.

-¿Cómo se encuentra tras la resaca electoral?

-Muy contenta, pero sobre todo satisfecha por la buena campaña que hemos hecho, que ha sido capaz de apelar a gente muy distinta. En este sentido, creo que ha sido un éxito porque cuando hablábamos de la confluencia Unidos Podemos nos referíamos a ella como una herramienta para atraer a gente muy diversa, que viniera de diferentes lugares pero que por primera vez se sintiera identificada con un espacio político. Y esto se ha evidenciado claramente en los resultados. Los territorios vascos son muy distintos pero el porcentaje que hemos obtenido es bastante homogéneo. Demuestra que quienes el 20-D dijeron que nuestros resultados fueron fruto de la causalidad se han equivocado. Tenemos un proyecto que ofrecer a Euskadi y que encaja en la ciudadanía.

-Una victoria agridulce...

-Es cierto que, si bien en Euskadi los resultados han sido muy satisfactorios, el camino hacia el cambio a nivel estatal se dificulta un poco, se ralentiza. Esto no quiere decir que sea imposible. Vamos a poner todas nuestras fuerzas en conseguir un gobierno alternativo al PP porque creemos que es malo que tengamos que sufrir otros cuatro años más sus políticas.

-Ha cumplido su reto de imponerse al PNV.

-Nuestro objetivo era mantener la victoria del 20-D y, a poder ser, mejorarla, y es lo que ha sucedido. El PNV se ha equivocado en esta campaña y no ha sido el único. En diciembre nos subestimaron y en junio nos han faltado al respeto. Se han pasado la campaña poniéndonos etiquetas contradictorias, pero lo que importa es que han olvidado lo que la sociedad vasca lleva meses diciendo: que quienes estamos hoy aquí, estamos para quedarnos. Ha ganado la agenda de la gente sencilla.

-Usted ha dado el 'sorpasso' en Euskadi, pero Iglesias ha quedado lejos...

-Habíamos repetido muchísimas veces en campaña que Euskadi tenía la posibilidad de ser avanzada del cambio político y creo que ha sido así. Euskadi ha amanecido diferente hoy y es porque el cambio ya ha llegado y es irreversible.

-¿Podemos Euskadi quiere tener en el Congreso grupo propio como En Comú y Marea?

-Sí. Sería muy útil para Euskadi. Y no solo lo queremos por los buenos resultados obtenidos sino también por estar a la altura de la confianza que ha depositado en nosotros la ciudadanía. Los que han creído en nosotros tienen derecho a estar representados como es debido.

-Sus primeras palabras tras conocer la victoria fueron que iba a haber en Euskadi «una nueva mayoría social». ¿Qué quería decir?

-Que hay que atender a dos tendencias: la evidente tendencia al alta de Podemos y la tendencia a la baja del PNV. Nosotros hemos entendido que cuando había que hablar de las demandas de los vascos, había que hablar de empleo, de juventud, de igualdad, de identidad y de la cuestión territorial, porque eran las cosas que preocupaban a la ciudadanía. Pero el PNV, a la hora de articular su discurso, no ha entendido cuáles eran las demandas de esa ciudadanía; le ha faltado pararse a escuchar.

-Podemos Euskadi ha subido 15.000 votos. ¿De dónde vienen esas papeletas? Haga una radiografía.

-Cuando una fuerza política es nueva evidentemente bebe de muchos lugares. Me atrevería a decir que el voto a Podemos viene de personas que no se sentían cómodas en otro espacio político, o de otras que nunca habían votado porque no se identificaban con ninguna formación y, por primera vez, Podemos es ese espacio con el que sí se identifican. Y también puede provenir, por supuesto, de otras formaciones como el PSE, EH Bildu o el PNV. Esta es la principal fortaleza de Podemos en Euskadi, que ha sabido entender que la sociedad vasca es muy plural y debe ofrecer un espacio en el quepa toda esa gente.

-¿Será posible mantener esta situación dentro de cuatro meses? ¿No ve posible la remontada de EH Bildu tras la debacle del domingo?

-Los resultados estatales no son extrapolables a unas elecciones autonómicas. La gente vota distinto. Pero creo que los resultados, y lo homogéneamente que están repartidos en los tres herrialdes, insisto de nuevo, evidencian que tenemos un proyecto sólido y estable, por lo que nuestra apuesta de cara a las autonómicas es volver a ganar. Pero no por el hecho de superar a otros partidos, sino porque tenemos un proyecto para Euskadi que es el que la ciudadanía vasca demanda.

-¿Su posición favorable al derecho a decidir ha sido decisiva en los buenos resultados?

-Creo que ha sido importante, sí. Pero cuando uno quiere gobernar debe abordar todas las cuestiones que están sobre la mesa y, por supuesto, en esta cita electoral era muy importante la defensa de los derechos sociales que nos estaban arrebatando, y también encontrar solución a la cuestión territorial. Una solución que tiene que pasar por las vías democráticas, por el derecho a decidir. Y no creo que esto solo lo apoyen quienes quieran decidir irse, quienes quieran la independencia. Puede opinar todo ciudadano que quiere que se le considere mayor de edad y dueño de su futuro.

-En este sentido, ¿podría haber entendimiento entre Podemos y PNV?

-Vienen tiempos políticos distintos en los que habrá que llegar a acuerdos con fuerzas muy distintas. Hacer política en democracia implica llegar a acuerdos sobre cuestiones concretas.

-¿Le seduciría más un gobierno de izquierdas con Podemos, PSE-EE y EH Bildu?

-Dependerá mucho de los resultados. Antes de la campaña ya nos reunimos con todas las fuerzas, y es cierto que cuando hablamos con PSE y Bildu de la agenda social, se encontraban puntos en común, pero no me atrevería a aventurar nada...

-¿El nuevo escenario político podría complicar la gobernabilidad?

-En Euskadi hay una grandísima cultura del pacto. Tenemos más facilidad que a nivel estatal... En cualquier caso, todos lo partidos acudiremos a la cita electoral de otoño con la voluntad de, posteriormente, sentarnos, dialogar y llegar a acuerdos.

-¿Van a mantener la coalición con Ezker Anitza- IU? Aquí se han salvado los muebles...

-Ahora tendremos que sentarnos, analizar bien los resultados y ver si esa suma sería para multiplicar o no. Habrá que verlo.

-¿Tienen motivos de reivindicarse en Euskadi ahora que tienen base propia al margen de Madrid?

-Recuerdo que tras el 20 de diciembre muchos nos acusaban de haber seguido simplemente la estela de Madrid, pero los datos evidencian que no es así en absoluto. En Euskadi se ha trabajado muchísimo y hemos sabido construir un proyecto que satisface a las demandas de la gente.

-¿Cree que en octubre Podemos podrá mantener los votos o se tenderá más al nacionalismo?

-Nuestro objetivo será ganar las elecciones autonómicas. Hemos sabido escuchar a la sociedad vascas y, sobre todo, tenemos las soluciones a sus necesidades. Muchas veces, en Euskadi, se cae en un discurso peligroso del 'aquí todo va bien y no hay nada que mejorar' y eso no es así. ¡Claro que hay cosas que se pueden mejorar!

-Ahora les toca encontrar candidato o candidata a lehendakari.

-Sí. Sí. Aunque no me preocupa especialmente. Es importante quién sea la persona que represente este proyecto, claro, pero me tranquiliza que Euskadi es un lugar donde tenemos una sociedad civil especialmente dinámica, y donde tenemos muchas personas que no habían podido dar el paso a la política institucional porque no tenían un espacio político a través del cual hacerlo. Esas personas serán, además, elegidas a través de unas primarias y esa es la mejor garantía de que las que salgan serán las mejores.

-Un candidato que se deberá enfrentar a dos pesos pesados como Urkullu y Otegi para sus partidos.

-Sé que vamos a encontrar a la persona perfectas para ese cargo.

-¿Tienen a alguien en mente ?

-Todavía no. Pero queremos tener designado al candidato para agosto.

-¿Y usted?

-No lo contemplo.

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