La profesión de docente

La profesión docente vive hoy en día una importante crisis. La mayoría de los profesores trabajamos fuera de nuestro horario laboral. Intentamos que nuestro alumnado esté en las mejores condiciones físicas y psíquicas para poder afrontar su aprendizaje. Tratamos de transmitir conocimientos a pesar de unas leyes educativas que pretenden lanzar a la sociedad analfabetos funcionales. Intentamos educar para la vida, aunque nos lleve a enfrentarnos con familias que buscan el aprobado sin esfuerzo. Estamos indefensos frente a agresiones. Frente a la devaluación del conocimiento. Sacrificamos nuestra vida familiar y también nuestra salud, pues la sociedad ha decidido reforzar el carácter asistencial de la escuela a costa del educativo. Y estamos en nuestro derecho de coger una baja o de realizar las reivindicaciones salariales pertinentes. Luchamos para que nuestros alumnos tengan su propia opinión y no sean manejados. Por eso, creo que el oficio de enseñante debería ser reivindicado por aquellas familias que aspiran a un futuro mejor para sus hijos.