Las calles más limpias

Desde que se hizo público que sería obligatorio recoger las heces de los perros depositadas en la vía pública o en cualquier otro lugar público ... o privado, así como diluir la orina con agua para evitar malos olores y daños en el mobiliario urbano, las calles parecen otras. La verdad es que están mucho más limpias. Y en este sentido, veo a diario a muchas personas comportarse de manera cívica y cumplir con la citada obligación. No obstante, también hay ciudadanos que siguen dejando que su perro haga en la calle lo que le da la gana, y luego dejan los restos en una acera o a la entrada de un portal. Pediría a esta gente que sepa comportarte y respete a los demás.