Músculo industrial

El lehendakari Pradales anunció ayer la creación de una alianza financiera de 4.000 millones para la transformación industrial. La iniciativa incluye un endeudamiento de ... 1.000 millones para acompañar a las EPSV, Kutxabank, Laboral Kutxa, BBVA, fundaciones BBK, Kutxa, Vital y Elkargi con el objetivo de fortalecer el arraigo, apoyar la expansión de nuestros proyectos estratégicos y atraer capital extranjero. La iniciativa contribuye a fortalecer el músculo industrial y tecnológico de Euskadi. Un paso relevante y positivo en línea con las reflexiones del informe Draghi, que apuesta por la transformación tecnológica, la descarbonización, la seguridad económica y el mantenimiento del modelo social europeo para hacer frente al declive económico europeo. Se trata de un objetivo muy loable en una coyuntura que, junto a las luces, encierra también sus sombras y en la que tenemos que diseñar propuestas de alto valor añadido para encarar los posibles temporales que se avecinan. Se trata de sumar fuerzas y poner en valor la cooperación y las sinergias en un contexto global de incertidumbre en el que la caída de algunos mercados europeos, como el alemán y el francés, ha sido un duro golpe para nuestros industriales, en especial del sector de la automoción, con una industria auxiliar en una situación de riesgo. La inquietud se ha activado y toca pasar de las palabras a los hechos para que las declaraciones de buena voluntad no se queden en mera retórica. Es un primer paso en la buena dirección.