Errenteria

El Ereintza Bitek supera el playoff tras un grandísimo fin de semana de balonmano en casa

Sin embargo, para poder disfrutar del triunfo, primero hubo que sufrir, y bastante. Como no podía ser de otra manera en unos partidos de este calibre, los nervios hicieron su efecto, y por ello se vieron menos goles que de costumbre. El encuentro del sábado ante el Leizaran finalizó con un 19-15 a favor del Bitek. Un marcador que reflejó de nuevo el buen nivel defensivo.

Tras ello, poco había que celebrar, ya que la mañana del domingo era clave. Las de Urko elustondo se enfrentaban a un Urdaibai que demostró porqué se encontraba en aquel partido. Las vizcaínas demostraron ser un conjunto muy complicado y sobre todo preparado para este encuentro.

Por su parte, el Ereintza Bitek estuvo falto de acierto de cara al gol, sobre todo en la primera mitad. Las claras ocasiones generadas no fructificaron en gran medida por el enorme nivel que demostró la guardameta rival que detuvo hasta seis claros lanzamientos. A su vez, «nos faltó algo de frescura en ataque», lamenta Elustondo. Esto hizo que el Ereintza Bitek se marchase dos goles por debajo al término de la primera media hora de juego.

No obstante, tras el paso por vestuarios, el equipo tuvo un punto de efectividad en ataque, mientras que en la defensa de nuevo el nivel estuvo muy alto, algo que ha sido fundamental a lo largo de toda la temporada. «Hay quienes creen que solo el ataque gana partidos, pero creo que demostramos que si estás bien en defensa también pueden lograr grandes cosas», destaca Elustondo.

A medida que iban pasando los minutos y la tensión iba en aumento, el público animaba cada vez con más intensidad. Liderados por el equipo del Ereintza Izarrak, que otra vez se hizo notar, todo el pabellón fue una fiesta. Aunque al igual que el equipo, también hubo momentos para sufrir, sobre todo viendo como el Urdaibai se ponía por delante en el marcador.

Por su parte, el encuentro quedó prácticamente sentenciado en los dos últimos minutos, con una defensa que desbarató cualquier opción de gol del equipo vizcaíno. A pesar de ello, hasta que no sonó la bocina, el equipo no celebró la victoria en ningún momento.

Con la victoria, solo hubo tiempo para disfrutar. El Ereintza salió vencedor, pero el domingo ambos equipos salieron ganadores. Tras agradecer el apoyo de la grada, los dos equipos bailaron juntos la conocida marcha de la Diana. No hubo tensión, ni protestas, solo dos plantillas que lo dieron todo y que lo supieron reconocer al final del choque, algo que en otros deportes es prácticamente inimaginable.

Tras un fin de semana lleno de emociones, el Ereintza envió su candidatura para que la fase se juegue en casa de nuevo, algo que se conocerá en los próximos días. En este aspecto, Elustondo solo quiere una cosa. «Lo único que les voy a pedir a mis jugadoras es que disfruten».