Errenteria
«Esta crisis no se resuelve con parches, sino con propuestas y medidas concretas»Diferentes asociaciones llaman «a toda la población» a echarse a la calle y participar en las acciones propuestas para el 30 de noviembre
«Si la crisis no estalla es debido a la explotación de las trabajadoras de hogar, que cubren las necesidades a las que ni las ... instituciones ni las familias llegan. Con unas condiciones de trabajo pésimas, marcadas por la falta de regulación del sector, la situación de discriminación a la que la Ley de Extranjería somete a las trabajadoras migradas es máxima», denuncian.
Así comienza el escrito que firmaron de forma conjunta «con resignación» diferentes asociaciones del municipio como Oreretako Asanblada Feminista, Zirika, Oreretako Pentsiodun Mugimendua, Oaingoz Hau, SOS arrazakeria, Zintzilik Irratia, Correos, San Marcosene Eguneko zentroa-Erresidentzia, Sagrado Corazón Erresidentzia, GOT, trabajadoras de hogar, zaintzaileak, ESK, LAB y ELA.
En una rueda de prensa que tuvo lugar en Emakumeen Etxea en la que participaron figuras de diferentes asociaciones subrayaron que «las tareas de cuidado son imprescindibles para vivir. No se pueden seguir invisibilizando y mercantilizando. La pandemia sacó a la luz sin ningún pudor la situación insostenible en algunas residencias para personas mayores, con un personal insuficiente y saturado de trabajo, con los usuarios sufriendo las consecuencias... pero la crisis de cuidados tiene muchas caras».
Denunciaron que «a todo ello hay que sumar la precarización del trabajo y el paro, las bajas pensiones, el encarecimiento de la vida doméstica, de la gasolina y de las necesidades básicas como el agua, la energía o los alimentos. Todo ello ahonda en la crisis social», manifestaron. Continuaron recordando que «seguimos siendo las mujeres de clases populares las que sostenemos los cuidados en las casas, en los centros de trabajo, en las relaciones. Seguimos acumulando una pobreza de tiempos y recursos, con dobles jornadas de trabajo, supliendo los escasos y precarios servicios públicos, haciendo malabares para llegar a todo e inmolando nuestras vidas en el proceso», expusieron indignadas.
«Es una responsabilidad social»
Ante tal situación sostuvieron que «el Movimiento Feminista se ha reactivado. Queremos revolucionar los cuidados para cambiarlo todo. Con el objetivo de transformar el actual régimen capitalista y patriarcal de vigilancia, hemos iniciado un proceso de reflexión y movilización desde la pandemia». Comentaron que «esta crisis no se resuelve con parches, sino con medidas y propuestas concretas» y creen que «la solución no vendrá con más digitalización, ni apelando a lo 'comunitario' de forma abstracta, porque ello reproduce la feminización y la familiarización de los cuidados».
Confían en que «se convierta en una responsabilidad social y no un negocio. Queremos impulsar medidas de transformación social para que los cuidados dejen de ser un bien de mercado», destacando que «hemos llegado a un acuerdo social con los principales agentes sociales y sindicales de Euskal Herria, y con ello, vamos a interpelar a las instituciones, comenzando por este 30 de noviembre». Ese día tomarán las calles de Errenteria y quieren que «las feministas y toda la población» se sumen a la cita.
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