Carlos de las Heras: «El pueblo israelí critica a Netanyahu por la falta de resultados»

– La guerra de Ucrania y la invasión de Israel en Gaza. ¿Estamos en el momento más tenso desde la guerra de los Balcanes?

– Es complicado medir este tipo de cosas. No podemos olvidarnos de otros conflictos como las guerras de Irak o Afganistán, pero en el caso del conflicto palestino-israelí sí que podemos asegurar que nunca habíamos visto unos niveles de violencia y de sometimiento tan elevados.

– ¿Qué diferencias ve?

– Es más de medio siglo de tensiones y ataques por ambos bandos. Cabe destacar que este nuevo enfrentamiento arrancó el 7 de octubre con un ataque por parte de Hamás. Israel tiene derecho a defenderse, pero su venganza está siendo desmedida. Ha hecho caso omiso a la Declaración de los Derechos Humanos y ha atentando contra niños, mujeres y hospitales. La cifra de víctimas está cerca de los 30.000.

– ¿Se puede seguir justificando los ataques de Israel como legítima defensa?

– El 29 de diciembre del pasado curso, Sudáfrica presentó una demanda contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por el genocidio del pueblo palestino. El pasado 26 de enero, la CIJ se pronunció al respecto y ordenó medidas para proteger a la población palestina. Entre ellas, pide a Israel abstenerse de cometer actos genocidas, prevenir y castigar la incitación directa y pública al genocidio y tomar medidas para garantizar la llegada de asistencia humanitaria a la población civil. Podría tratarse de una sentencia sin precedentes, ya que los delitos de genocidio castigan tanto a los impulsores como a sus aliados. Así las cosas, podría perder apoyos como Estados Unidos, su principal proveedor armamentístico, haciendo así más próximo un final y más fácil cualquier intervención.

– ¿La población israelí apoya las políticas de su líder Netanyahu?

– A mi entender, hay bastante división de opiniones. El apoyo a la invasión no ha bajado, pero la sociedad está cansada ante la falta de resultados. Tras el ataque de Hamás, Netanyahu prometió defenderse y recuperar a todos los israelíes secuestrados tras el ataque. Medio año más tarde, 130 de los 250 siguen en manos de los terroristas. Algunos grupos de la sociedad empiezan a criticar la falta de contundencia del ejército israelí.

– No es el único frente en el que están trabajando. También está la guerra entre Rusia y Ucrania.

– Así es. Las exigencias por nuestra parte son las mismas: el alto al fuego y la defensa de los Derechos Humanos. El inicio de la guerra a gran escala empezó hace dos años, pero los territorios de Crimea conviven con un ambiente bélico desde hace ya diez años. Según nuestros datos se han contabilizado más de seis millones de desplazados y refugiados desde el origen de la trifulca. A este problema se le suma uno más. La sociedad ucraniana está bastante envejecida. De los más de 45 millones habitantes que conforman el país, casi una cuarta parte tiene más de 60 años. Estos datos, sumados a los soldados y milicianos caídos en guerra, está haciendo que el ejército ucraniano eche mano de menores de edad y mujeres.

– A la guerra se le ha sumado la muerte del opositor ruso Alekséi Navalni.

– Es un ejemplo más de leyes controladoras de Rusia. Navalni ha sido el último de los opositores que ha caído en su intento por desbancar a Putin del poder. El deterioro físico que ha sufrido desde su ingreso en prisión ha sido evidente. Además, y pese a que los informes del Kremlin apunten a que se hizo todo por salvarle la vida, el hecho de que se haya tardado tanto en devolver el cuerpo a la familia es, cuanto menos, sospechoso.

– Este año hay elecciones en Rusia. ¿Se atreve a vaticinar un resultado?

– Lo más seguro es que Putin se mantenga en el poder. Así lo dicen también las encuestas. Desde que es presidente ha trabajado para acabar con la oposición política y activista. Cualquier persona que se levante contra él es detenido y juzgado. Se ha visto estos días con aquellos que han querido honrar la memoria de Navalni. Será difícil que haya otro vencedor en las elecciones.

– Mañana comparecerá ante las Juntas Generales de Gipuzkoa. ¿Cuál es el propósito de la ponencia?

– Trasladar la preocupación por la situación en Gaza y otros territorios de Palestina como Cisjornadia. Queremos explicar qué es lo que está sucediendo a través de testimonios de personas que están siendo víctimas del conflicto, pero también poder explicar el contexto y por qué se ha llegado a esta situación. Es importante que los dirigentes sean conscientes de las situaciones que se están viviendo para que puedan actuar y presionen a otros gobiernos a favor de un alto al fuego humanitario.

– Además también tiene organizadas otras cuatro comparecencias entre mañana y pasado.

– Eso es. Este martes compareceré en el colegio Ama Guadalupekoa de Hondarribia, el centro de FP Easo Politeknikoa y la Facultad de derecho de la UPV/EHU. El miércoles, en el Campus Donostia de la Universidad de Deusto.