Gema Varona | Directora del Instituto Vasco de Criminología

«Se está trabajando mucho en el impacto de las víctimas del ciberespacio»

– Cada vez más somos más específicos con el tipo de victimización en cuanto a los perfiles de víctimas, como personas con discapacidad o diversidad funcional, menores, víctimas de trata, personas sin hogar... En la actualidad se está trabajando mucho en el impacto de la victimización en el ciberespacio (víctimas de fraude, de un ciberataque o de un delito sexual).

– ¿En qué se diferencian estas últimas?

– Lo que ocurre en el ciberespacio al final es una continuación del mundo real, es muy intrusivo, es 24 horas los 7 días de la semana. El impacto es inmediato y perpetuo. Además, en muchas ocasiones, es más difícil identificar al autor.

– Comenta que cerca del 90% de los delitos sexuales no se denuncia. ¿Por qué cree que ocurre?

– Cuando nos hacemos esta pregunta tendríamos que ser nosotros mismos los que dijésemos, ¿qué haríamos? Porque, ¿qué pasa si el agresor es tu padre, tu tío o un conocido...? Hay sentimientos de culpa, vergüenza, de qué va a venir después, los costes que va a suponer un juicio, qué apoyo van a tener, si le van a absolver o no, etc. Por eso es muy importante, y de hecho el Estatuto de la víctima lo recoge, que aunque no se haya denunciado o no quieran hacerlo, se tienen que crear oficinas de atención a víctimas, como existen en otros países.

– ¿En qué otros proyectos está trabajando en este sentido?

– Tenemos uno en marcha con el Ministerio de Ciencia y varias universidades sobre victimología verde, es decir, aquella producida por delitos medioambientales. Es muy peculiar porque se trata de algo transnacional, es una victimización difusa, a veces no se considera delito, afecta a seres humanos y a otros seres vivos y siguientes generaciones.