«Si los trabajadores judiciales paran, ojo porque se para todo el sistema; nos viene una buena»

No tenía problemas en identificarse Marisa de Arriba, abogada a la que se le había suspendido un juicio laboral a las 9.30 horas. Según cuenta, en el juzgado de lo social se habían juntado el juez, abogados, tramitadores y secretarios judiciales (LAJ). «Pero faltaba el auxilio de sala, es decir, gente para grabar el juicio, citar a los testigos, etcétera». Sin ellos, «no se celebra un juicio».

Y este perfil (gestores, tramitadores y auxilios –o agentes judiciales–) los que desde el lunes se pusieron a la acción para reclamar una equiparación salarial con el resto de los funcionarios del Gobierno Vasco, la institución que les abona el sueldo. Asimismo, reclaman un complemento específico para el personal de los juzgados de violencia de género, que están «desbordados de trabajo, saliendo a las siete u ocho de la tarde para poder hacer frente a todo el trabajo», se solidarizaban en el exterior del edificio judicial los abogados Daniel Martín Sorolla y Pablo López Goenaga.

El primero debía asistir a una audiencia preliminar que «no se ha podido celebrar». Sin embargo, en su opinión «es tal el parón que se nos viene encima», que el juez del caso ha instado a las partes «a alcanzar un acuerdo que evitara el juicio. Y hemos podido llegar a un acuerdo, pero como no lo podíamos firmar por la huelga, tendremos que perder otra mañana para hacerlo».

López Goenaga, en cambio, esperaba a su cliente para acudir al Servicio de Patología Forense, donde «en principio» se mantenía la cita. Ambos abogados reconocían que «igual que ha pasado en Sanidad, que ya no es la joya de la corona que fue, en Justicia también se ofrece un servicio mucho peor al de hace unos años». Martín Sorolla se quejaba incluso de los plazos para cobrar los módulos del turno de oficio. «El de mayo de 2022 lo cobré en diciembre y el de junio, a finales de febrero. Así andamos». Sin embargo, ambos recalcaron que se quejan «del servicio de justicia, no de la atención por parte de los funcionarios ahora en huelga, ya que al menos en Irun y Donostia que es lo que conocemos, es fabulosa. Su predisposición y amabilidad son absolutas. Y esta gente, trabaja de verdad».

También había sido atendida amablemente la abogada que tenía un auto a las 12.00 horas. Rondaban las 10.20 cuando salía del juzgado. «He venido antes por la huelga, para no hacerle venir en balde a mi cliente, que no vive en Donostia. Y he hecho bien, porque el oficial responsable de mi expediente está en huelga. Como mañana pararán de diez a una, me han dicho que venga entre las 9.00 y las 10.00». Su compañero tenía cita en lo social a las 12.45, y «le han dicho que el acto de conciliación sí se podría celebrar, pero no el juicio».

Según los datos facilitados por el Gobierno Vasco, la respuesta a la huelga general convocada hoy ha sido del 50% en Euskadi, con un 51,3% de seguimiento en Bizkaia, un 49,2% en Gipuzkoa y un 47% en Álava. En el territorio guipuzcoano, han fichado 262 trabajadores sobre una plantilla total de 517.

«Entre la huelga anterior de los LAJ y ahora esta, nos va a afectar lo mismo que la pandemia, cuando se paró todo dos meses», concluía Marisa de Arriba.