Desde timos para ayudar a refugiados ucranianos a viajes falsos a la Meca

Suplantación de oenegés. La Unión de Consumidores de Euskadi ha alertado recientemente de «actuaciones fraudulentas» que tienen como objetivo «aprovechar la generosidad y solidaridad de las personas con Ucrania». ¿En qué consisten estas estafas? Según advirtió esta organización, algunas personas afirman falsamente que pertenecen a oenegés o a entidades de colaboración con Ucrania para obtener dinero y datos bancarios. Se han detectado casos tanto presenciales como telemáticos.

Viajes falsos de peregrinación. En plena pandemia, la Guardia Civil de Navarra esclareció 18 casos de estafa cometidos en diferentes comunidades autónomas, entre ellas Euskadi, y concretamente en Gipuzkoa. Dos personas habían sido estafadas al contratar viajes de peregrinación a la Meca, con una cuantía superior a los 90.000 euros.

Citas falsas para vacunarse. Quizá esta fue la estafa más repetida cuando comenzó la campaña de vacunación contra el Covid-19. Los presuntos autores contactaban con las posibles víctimas, siempre personas mayores de 84 años, y les indicaban que había comenzado la campaña de inoculación contra el coronavirus y que necesitan datos para fijar una hora y pasar por sus domicilios. Así lo confirmó la Ertzaintza en su momento, cuando aseguró que el objetivo de la estafa era exigir a estas personas vulnerables alguna cantidad económica por «unos supuestos servicios prestados o incluso entrar en viviendas o cometer algún hurto».

El timo de la estampita. Es uno de los clásicos. El timador dice que tiene una enfermedad mental y lleva un sobre con billetes haciendo ver que no sabe lo que son, asumiendo que son estampitas. Los vende por un precio menor. Quien en realidad es timado cree que está estafando, pero realmente es al revés. Compra un billete falso y el que supuestamente tiene una discapacidad se lleva el dinero.

El falso número premiado. La víctima es abordada por un estafador que le dice que lleva un número de lotería premiado. Pero no puede cobrarlo personalmente. Le ofrece comprarlo por un precio menor al premio.

Bizum y wallapop. Ahora que está en auge la venta de segunda mano, una de las estafas que más se repite es la del bizum y wallapop. Los ciberdelincuentes se hacen pasar por compradores y se muestran interesados en un producto. Envían al vendedor una solicitud de dinero y si este la acepta, cae en la trampa. ¿Cómo? Terminará pagando lo que cuesta el producto a los estafadores, que son quienes solicitan el dinero vía bizum, y además probablemente se lleven el producto también. Hacen ver al vendedor que recibe el bizum, pero en realidad lo paga.