Multitudinario adiós a Joxean Larrañaga, «un párroco humilde y querido por todos»
Centenares de personas despidieron ayer en la iglesia de Santa María de Deba al sacerdote de 67 años en un acto cargado de emotividad y cariño
Una abarrotada iglesia de Santa María de Deba dio ayer el último adiós a Joxean Larrañaga, el párroco de 67 años que el pasado ... jueves perdió la vida tras precipitarse por un barranco en el valle de la Ripera de Panticosa, en el Pirineo aragonés. En un emotivo funeral de despedida oficiado por Patxi Aizpitarte, párroco de la localidad, la comunidad religiosa de Gipuzkoa a la que perteneció Joxean pidió que a su compañero y amigo se le recuerde por ser «una persona humilde, entrañable y muy querida por todos».
Publicidad
Al acto acudieron familiares, amigos y vecinos del municipio debarra además de feligreses venidos de diferentes partes del territorio como Oñati, Azkoitia y Amasa-Villabona, que se acercaron a la iglesia en varios autobuses para despedirse de quien consideran «un hombre con un corazón enorme y una bondad que jamás olvidaremos». Aunque todavía cuesta asimilar lo ocurrido, también hubo quienes sonrieron al recordar alguna anécdota vivida junto a Joxean, «un párroco que ha dejado huella».
Sacerdotes amigos de Larrañaga fueron los encargados de portar el ataúd tanto a la entrada como a la salida de la iglesia, donde también se despidió a Maria Arriola 'Artzabaldarra', vecina de 98 años recientemente fallecida. Dentro del templo religioso, acompañando a Patxi Aizpitarte, al que Joxean sustituyó en Deba en algunas ocasiones, estuvieron Felix Azurmendi Aierbe y Jose Inazio Eguzkitza Iruretagoiena, los dos amigos y también curas guipuzcoanos que en el momento del trágico accidente se encontraban junto al sacerdote. Durante la misa, sobre el féretro se colocaron tanto la estola como el cáliz que Joxean utilizaba. Cantó el coro de la parroquia debarra y, al finalizar la misa, un miembro de la parroquia de Azkoitia le regaló unas bonitas y sentidas palabras. «Joxean estaba siempre dispuesto a escuchar y a ayudar a cualquiera que le pidiera un consejo».
También hablaron integrantes de la parroquia de Amasa-Villabona, que además de dedicarle un discurso con mucha fuerza y sentimiento, tocaron la armónica en su memoria. La actuación terminó con aplausos. Asimismo, ya en el pórtico, txistularis y dantzaris, entre los que se encontraban varios familiares de Joxean, le dedicaron el 'agurra' como colofón a un acto cargado de emotividad y de cariño. «Con tus actos has hecho un mundo mejor. No sabes cuánta gente te quiere. Ya puedes descansar en paz», expresó la familia.
Publicidad
El fatal accidente sucedió cerca de las 13.00 horas del pasado jueves mientras Joxean hacía una pequeña ruta de senderismo con Felix Azurmendi Aierbe y Jose Inazio Eguzkitza Iruretagoiena, dos amigos y como él sacerdotes guipuzcoanos con los que llevaba más de 30 años yendo al Pirineo. En un momento dado, estos dos últimos pararon a descansar pero Larrañaga, «que era el más ágil de los tres en el monte» pese a tener parkinson -según sus palabras-, continuó. Pasado un rato, al ver que su amigo no regresaba, salieron en su búsqueda. Pero no hubo éxito. Entonces decidieron regresar a casa, y al ver que tampoco estaba, alertaron a la Guardia Civil, que encontró su cuerpo el viernes, sobre las 11.15 horas, en un barranco en la zona del Pico Faceras. Al parecer, se habría precipitado y dado un golpe mortal en la cabeza.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión