El accidente ocurrió en la avenida de Navarra en Donostia, frente al ambulatorio de Gros. FOTOS GORKA ESTRADA

Más de la mitad de las víctimas en carretera de Gipuzkoa en 2023 son motoristas

Un hombre de 62 años se convierte en el sexto conductor de moto fallecido en lo que va de año en Gipuzkoa, y la undécima víctima en las carreteras del territorio

Macarena Tejada y Marcela Salazar

San Sebastián

Viernes, 14 de julio 2023, 02:00

La muerte de un motorista este jueves en un accidente de tráfico en pleno casco urbano de Donostia eleva ya a seis los conductores ... de este tipo de vehículos que han perdido la vida en la carretera en lo que va de año en Gipuzkoa. Son más de la mitad de las once víctimas mortales en la red viaria del territorio. El último siniestro se cobró la vida de un vecino de Donostia de 62 años en la avenida de Navarra del barrio de Gros, al chocar con un autobús, un accidente mortal que eleva la preocupación en fechas «críticas», como es el verano. «Las noticias de fallecidos en las carreteras siempre son preocupantes, pero con todo el mes de julio y agosto por delante todavía más. Suelen producirse muchos desplazamientos y los motoristas son colectivo vulnerable», alerta Ana María Novella, presidenta de la asociación Stop Accidentes.

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El fatal suceso, que deja el tercer motorista fallecido en Donostia en lo que va de año y la undécima víctima en las carreteras de Gipuzkoa, ocurrió cerca de las 11.30 horas. Una moto, de 125 centímetros cúbicos, y un autobús colisionaron en la avenida de Navarra, a la altura de la casa de cultura de Okendo, en dirección a la Zurriola. Hace menos de un mes, un varón de 63 años, que conducía su moto en esa misma vía, resultó herido en otro aparatoso accidente con un coche, y cuatro meses atrás otro motorista murió a un kilómetro de distancia, en la avenida José Elosegui.

Al lugar del accidente, que permaneció cortado al tráfico más de cuatro horas, se acercaron varias dotaciones de Ertzaintza y Policía Municipal, además de dos camiones de Bomberos y hasta tres ambulancias, que no pudieron hacer nada por salvar la vida de la víctima. Al parecer, falleció en el acto. «Nos acercamos a ayudar al motorista, pero ya no había nada que hacer», aseguraban testigos de lo sucedido.

Atenciones por el shock

Mar Lázaro, que trabaja en el ambulatorio de Gros, salió inmediatamente en ayuda de la víctima. «Oí el ruido, vi la moto tirada y al motorista detrás del autobús, pero pensaba que estaba mal herido», explicaba en la entrada del centro de salud, aún en estado de 'shock'. No fue hasta que se acercó al hombre cuando vio la «magnitud» de lo ocurrido: «Estaba una chica tomándole el pulso, pero ya no había nada que hacer».

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Investigadores de la Guardia Municipal, en colaboración con la Ertzaintza, se desplazaron al lugar para tratar de aclarar las causas del siniestro y hablaron con testigos así como con el conductor del autobús. Los ocupantes de un coche que se encontraba justo al lado del accidente, también prestaron declaración. Incluso una de estas personas tuvo que ser atendida por un ataque de ansiedad. Según los empleados del centro cultural Okendo, que fueron alertados de lo sucedido por viandantes que les pidieron que llamaran al 112, la mujer «tuvo que tumbarse en el suelo» por la «impresión» que le causó el suceso. Pasadas las 13.00 horas se procedió al levantamiento del cadáver.

El fallecido de este jueves se convierte en el sexto conductor de moto que muere en las carreteras guipuzcoanas y el tercero en San Sebastián, tras el trágico mes de marzo. El 17 de ese mes un donostiarra de 51 años murió cuando circulaba con su moto en la GI-20, en el entorno de Garbera, mientras que unos días después, el 31, un joven de 20 años falleció en el alto de Miracruz cuando acudía a trabajar al puerto de Pasaia tras haber dejado a su hermano menor en un colegio cercano de la zona.

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Los motoristas fallecidos en accidente de tráfico suponen ya más de la mitad de muertes en carretera este año en Gipuzkoa (seis de once víctimas). Y no solo eso. En lo que va de año ha fallecido casi la misma cifra de personas en moto que en todo el año anterior. Si en 2022 se contabilizaron siete motoristas entre las dieciocho víctimas en las carreteras de Gipuzkoa, en la primera mitad de 2023 ya van seis.

¿Pero por qué este «elevado» número de víctimas? «Además de ser un colectivo vulnerable, porque la carrocería de la moto son los propios motoristas, es un vehículo que cada vez se usa más», explica la presidenta de Stop Accidentes. «Es más ligera y se aparca con más facilidad que un coche y eso ha hecho que su uso aumente». Quizá por eso, en su opinión, para conducir una moto no debería bastar con el permiso de coche.

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Las instituciones han redoblado sus mensajes para concienciar sobre la seguridad vial y han puesto el foco precisamente en los colectivos más vulnerables, como son las motos, los ciclistas y los peatones.

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