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Un género clásico en el periodismo, al menos en el que ha practicado EL DIARIO VASCO, es el de la encuesta a personalidades sobre qué ... piden a los Reyes Magos. Se entiende que no se les pregunta por objetos concretos, sino que es una forma de expresar sus deseos generales y apuntar las carencias que detectan.
En la edición del 4 de enero de 1970, nuestro diario publicó una encuesta de este tipo: «Hemos preguntado a diversas personalidades de la ciudad qué es lo que han solicitado de los ilustres mensajeros que ofrecieron al Niño Dios oro, incienso y mirra». Sus respuestas nos ayudan hoy a evocar las personalidades y necesidades de entonces.
Hace 55 años el obispo era Jacinto Argaya, que daba una respuesta muy breve: «Que en Guipúzcoa nunca se oculte la Estrella de la Paz».
El alcalde donostiarra era Felipe de Ugarte, cuya respuesta tenía truco. Pedía una sola cosa, que le permitía obtener todas...
1970 En una encuesta
sobre qué pedían a los Reyes Magos, el alcalde soñaba con una varita mágica con la que resolver todos los problemas de la ciudad. Un Palacio de Congresos y otro para el Festival de Cine eran otros deseos de difícil consecución
«Mi petición debería ser una sola: que los Magos me dejasen una varita mágica con la que pudiera resolver todos los problemas que actualmente tiene planteados la ciudad. Pero como eso parece imposible, les he pedido en primer lugar que arreglen todos los problemas de urbanismo y las necesidades de los funcionarios del Ayuntamiento y demás personal municipal. Y además, que se solucione prontamente el problema de la mejora en el abastecimiento del agua y el de los teléfonos».
Seguro que los actuales políticos también se apuntarían a la varita mágica, o se conformarían con que se cumpliera uno solo de sus deseos, lo que no le ocurría entonces al concejal José María Pidal...
«Vuelvo a pedir lo mismo que el año pasado. Por lo visto no me debí portar muy bien y sólo se acordaron de dejarme carbón». Volvía a solicitar «el Palacio de Congresos, que tanto bien haría a San Sebastián y a su turismo», el arreglo de las calles, mayor iluminación navideña y, ya puestos, un puerto deportivo.
Eduardo Chillida aprovechaba la encuesta para señalar un problema concreto: «Yo pido a los Reyes que se solucione el asunto de Orbegozo. Y nada más». La empresa de Zumarraga estaba viviendo una larga huelga en la que los trabajadores pedían medidas de seguridad.
Andoni Elizondo, entrenador de la Real Sociedad, pedía «triunfos ininterrumpidos y la consecución de cuantos campeonatos y trofeos sea posible».
El director del Festival de Cine, Miguel de Echarri (en el centro en la foto superior), pedía tres cosas a los Reyes Magos en 1970: «La primera, que tengamos fortuna en encontrar buenas películas para nuestro Festival. La segunda, que éste tenga la acogida y el cariño que se debe a una empresa nacional. Y la tercera, que también es muy importante, que los Magos iluminen a cuantos tienen que resolver los problemas del Palacio del Festival a fin de que sea pronto una realidad».
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