El inicio de la primavera trae chubascos

El invierno también ha transcurrido dentro de los parámetros normales. Pero lo que comenzó como una estación invernal «húmeda y cálida» ha terminado transitando hacia un febrero «muy seco y muy cálido», según destacan desde Euskalmet. Es más, en lo que respecta a las temperaturas, este invierno se ha registrado una anomalía positiva de aproximadamente 1,6º en comparación con la media normal de 1991-2020.

Sea como fuere, los avisos amarillos y las alertas naranjas han sido, probablemente, los mayores protagonistas estos últimos meses, llegando a contabilizarse un total de 87 alertas en Euskadi -77 avisos amarillos y 10, naranjas-. Y es que en diciembre, fue la borrasca 'Darragh' la que llegó pisando fuerte, dejando huella en forma de árboles caídos, desprendimientos y grandes bolsas de agua en las carreteras vascas. Solo en una jornada -domingo 8 de diciembre- se registraron 269 incidencias en Gipuzkoa.

Y es que las dos primeras semanas de diciembre fueron «muy lluviosas, registrándose más de la mitad del acumulado mensual», señala Euskalmet. Pero enero tampoco se quedó corto. En el primer mes del año se dieron nada más y nada menos que 41 avisos amarillos y seis alertas naranjas en Euskadi; la mayoría de estas provocadas por las profundas borrascas que desfilaron a partir del día 24 dejando fuertes temporales de viento, mala mar y precipitaciones abundantes en los tres territorios vascos.

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El mercurio rozó ayer los 20 grados en todo el territorio, lo que dio pie a que los guipuzcoanos despidieran el invierno de la mejor manera posible: desde las terrazas de los bares o desde los paseos más próximos al litoral. Y aunque parece que las temperaturas se van a mantener estables a lo largo de los próximos días, con máximas de 19º y mínimas alrededor de los 10º, la inestabilidad llega a Gipuzkoa de la mano de la primavera.

Así, el de hoy será un día nuboso y con probabilidad de chubascos, especialmente a partir de la tarde. De manera similar, el de mañana será un día mucho más revuelto e inestable. Aunque las máximas seguirán rondando los 19 grados, por la mañana la probabilidad de chubascos aumentará. Con el paso de las horas la posibilidad de que llueva volverá a disminuir, pero no será momento de guardar los paraguas, porque por la noche podría volver a llover.