El Gobierno Vasco cesa a la directora de Euskadi Kirol Portuak, Edurne Egaña, en pleno debate por los amarres
Jon Asua ha sido nombrado nuevo director de la entidad que gestiona los puertos deportivos de Euskadi
El Gobierno Vasco ha cesado a Edurne Egaña como directora de Euskadiko Kirol Portuak (EKP), el ente público que gestiona los puertos deportivos de Euskadi, y ha nombrado a Jon Asua como su sustituto, quien asume el cargo en un momento de especial tensión por la gestión de los amarres y concesiones en los puertos de Gipuzkoa y Bizkaia. El relevo se produce en medio de un proceso participativo, impulsado por el Gobierno Vasco, para actualizar la normativa que regula la adjudicación de amarres, datada de 2017 y que eliminó el criterio de antigüedad para decidir las concesiones de los amarres, que suelen tener una duración de 15 años.
En la actualidad hay 2.265 amarres en los siete puertos que gestionan estas dos instituciones en Gipuzkoa: 672 en el puerto deportivo de Hondarribia, 280 en el Muelle de Veteranos de Hondarribia, 396 en Donostia, 283 en Orio, 270 en Getaria, 69 en Deba y 295 en Mutriku. Y según la actualización más reciente que ofreció Egaña a principios de este mes, hay 1.129 personas en lista de espera en los puertos deportivos de Gipuzkoa para un total de 2.265 amarres, de los cuales 2.101 están actualmente adjudicados. Egaña ofreció estas cifras el pasado 8 de octubre durante una comisión en el Parlamento Vasco, a petición del PP, que pidió su dimisión o cese por la «desastrosa gestión» de los amarres en la localidad de Uribe-Kosta.
Los populares llegaron a acusar a Egaña de «sospechas de amiguismo» a la hora de adjudicar las plazas para los barcos de recreo. También de encargar a una empresa «a dedo» un contrato menor y de estar sumida en «un bucle de incompetencia». Egaña, por su parte, acusó al PP de «calumnias y difamaciones».
En medio de esta polémica, el Gobierno Vasco ha decidido reemplazar a Egaña por Asua. Hace unas semanas, el pasado sábado 4 de octubre, el Gobierno Vasco y EKP organizaron en Orio la primera sesión de escucha sobre la actualización de la Orden de Amarres con usuarios y futuros amarrista, aunque solo 50 personas pudieron participar en esta pese a que se recibieron 280 inscripciones, por lo que 230 solicitantes quedaron fuera.