Vivienda

«Busco un piso céntrico en Donostia y, cuando lo encuentre, lo compraré»

Emmanuel Nataf (París, 1990) es una de las grandes fortunas que se enamoró rápidamente de Donostia al poco tiempo de visitarla por primera vez. Ahora, ha decidido dar un paso más y está interesado en comprar una vivienda aquí. Puntual a la cita con los agentes inmobiliarios, espera en la puerta del portal número 18 de la calle Urbieta de Donostia. Es el último piso que ha llamado su atención y por el que podría decantarse para mudarse a Donostia. Sin barriga, ni bombín, ni una gran bolsa con el símbolo del dólar que cuelgue del hombro, su corta edad y su imagen está muy alejada del estereotipo del hombre millonario del Monopoly. No destaca entre el resto de los viandantes.

Las interacciones entre el posible comprador y vendedor también son similares a las de cualquier otro ciudadano interesado en adquirir una vivienda. «¿El ascensor es nuevo?», «¿la caldera está renovada?» o «¿cómo son los vecinos?» son algunas de las dudas de Emmanuel. ¿La principal diferencia con el resto de compradores? Que este joven está interesado en hacerse con un piso tasado en 1,2 millones de euros.

Parisino de nacimiento, aunque residente en Londres, Emmanuel ha amasado su riqueza gracias a la 'start up' Reedsy Limited, una plataforma de auto publicación que permite a los escritores desarrollar su historia y contactar con un editor desde la misma web. «Vine el año pasado por el Jazzaldia. Desde entonces he visitado la ciudad un par de veces más y la verdad es que me encanta. Su forma de vida, sus calles, la gastronomía, la sociedad, todo», explica. Además, destaca que «los donostiarras son presumidos, muy coquetos. Me recuerdan al ambiente de mi París natal».

El domicilio en cuestión está equipado con la última tecnología. Una puerta de máxima seguridad valorada en 9.000 euros, un sistema de domótica con el que controlar la luz o la temperatura de cualquier estancia de la casa o unas ventanas reforzadas que aíslan totalmente del sonido pese a estar sobre una de las vías principales de la ciudad son algunas de las características de esta lujosa vivienda situada en el corazón de Donostia. Sin embargo, los algo más de 100 metros cuadrados de vivienda reformada y la terraza espectacular desde la que se puede disfrutar de las vistas a la catedral del Buen Pastor no terminan de convencer a Emmanuel. «El salón, la cocina y el comedor me encantan, pero los cuartos son algo oscuros... Habrá que seguir buscando», asegura.

Lo tiene claro: pese a tener el presupuesto para hacerlo, no se va a conformar con cualquier cosa. «Quiero una casa en el centro de la ciudad. Me gusta la zona del Buen Pastor, tener cerca La Concha». El precio de los espacios que cumplen con las exigencias de Emmanuel oscila en torno al millón de euros. «No manejo una presupuesto específico. No me he marcado ningún tope. Cuando vea algo que me guste, que me convenza, lo compraré», apunta.

Su situación económica le posibilita afrontar un pago tan elevado, pero pretende comprar esta nueva vivienda vendiendo su actual domicilio. «Yo vivo en el centro de Londres, en un piso similar a este que he venido a visitar. Allí el mercado inmobiliario también se mueve en las mismas cifras que en Donostia, lo que me sorprende teniendo en cuenta que uno es una capital de un país como Inglaterra y Donostia, no», apunta. «Mi idea es vender el actual y comprar un piso en Donostia y otro en París».

El perfil de Emmanuel Nataf se aleja ligeramente del tipo de extranjero que se interesa por hacerse con algún inmueble en Gipuzkoa, según el último informe desarrollado por la inmobiliaria Areizaga, especializada en el segmento extranjero y viviendas de lujo.

Jaime Euba, responsable de Residencial en Areizaga Inmobiliaria, explica que el foráneo que se acerca a Donostia para hacerse con una propiedad suele ser «una pareja de Estados Unidos o Reino Unido que busca un piso de 120 m² y tres habitaciones». Las calles más demandadas son Hernani, Zubieta, Miramar, Andia o Miraconcha, todas ellas en el centro de la capital guipuzcoana. Otra de las peticiones es que tenga vistas a La Concha. «Ese tipo de vivienda suele tener un precio por encima de 1,5 millones de euros, pudiendo llegar hasta los dos millones. El mismo tipo de vivienda pero en el interior, ronda entre los 800.000 euros y 1,2 millones».

«Son compradores que buscan un producto muy bien ubicado. Saben que en Donostia no se puede construir más y, en caso de querer venderlo en el futuro, es algo que no va a perder valor, sino lo contrario», apunta Euba. De ahí que las viviendas céntricas de la ciudad tengan una mayor demanda que aquellas situadas en las afueras a pesar de que puedan tener una mayor superficie. «También hay compradores más bucólicos, pero la mayoría buscan comodidad y cercanía con la ciudad», indica.

Por lo general, suelen ser compradores a los que no les gusta «perder el tiempo». «Es gente que estudia y conoce el mercado, así que para cuando vienen a ver una vivienda es porque ya tienen una decisión tomada. Si encuentran algo que les gusta, que es lo complicado, suelen ser operaciones rápidas», asegura. «No necesitan financiación, y en uno o dos meses el acuerdo suele estar cerrado».

A pesar de esta tendencia, «la gran mayoría de compradores de viviendas de lujo en Donostia siguen siendo guipuzcoanos o donostiarras», aseguran desde la inmobiliaria.