Drogas, pistolas y ganzúas en un bajo de Donostia
La Fiscalía pide 5 años y 4 meses de prisión para un hombre que traficaba con estupefacientes en un local vacío cercano a la Sagrada Familia de San Sebastián
AIENDE S. JIMÉNEZ
Viernes, 7 de octubre 2022, 06:33
Era un local sin ningún tipo de actividad comercial, situado en la calle Sagrada Familia el barrio donostiarra de Amara, donde sospechosamente entraba y salía mucha gente. La Guardia Municipal decidió intervenir y se encontraron un bajo lleno de drogas, varias pistolas, ganzúas y placas de matrícula. Era el almacén de un hombre que se enfrenta a 5 años y cuatro meses de prisión por un delito contra la salud pública, además de a una multa de 18.000 euros.
La policía local consiguió desarticular esta bajera dedicada al tráfico de drogas gracias a un dispositivo de vigilancia que estableció en 2019 en las zonas contiguas a la plaza del Sauce, debido a las quejas vecinales que habían estado recibiendo por la inseguridad que percibían. Así, los agentes observaron un local situado en la calle Sagrada Familia, que aparentemente no tenía ningún uso comercial, pero en el que salía y entraba gente de continuo. Además, pasaban muy poco tiempo en su interior.
Las patrullas decidieron intervenir el 4 de abril por la tarde, e identificaron a un hombre que salía del lugar. En su poder encontraron 108 pastillas repartidas en dos bolsas que resultaron ser MDMA con un valor de 1.652 euros, las cuales iba a vender a otras personas. Este sujeto también está acusado por la Fiscalía por un delito de salud pública y se enfrenta a 4 años de prisión.
Después, los agentes interceptaron al responsable del local cuando lo abandonaba llevando encima 875 euros y 1,2 gramos de ketamina. Aunque lo que encontraron dentro fue mucho más. En la planta baja, en una estantería, hallaron una pistola de aire comprimido, varias balanzas de precisión, diferentes tipos de droga, como resina de cannabis, MDMA en polvo y en pastillas, que tenían un precio de mercado de más de 1.000 euros. Además, en un frigorífico hallaron anfetamina adulterada con cafeína en una cantidad que alcanzaba un valor de 3.000 euros. En otra estantería encontraron además una pistola detonadora y una bolsa con dieciséis cartuchos de fogueo.
Una mochila sorpresa
El botín que incautaron los agentes no se quedó ahí. En una mochila que estaba en el suelo había una máquina de envasado al vacío utilizada en cocina y un fusil de aire comprimido. Cerca, en el cajón de una mesa encontraron 65 pastillas de MDMA con valor de 758 euros, y también se localizaron cinco bolsas con juegos de ganzúas y herramientas de cerrajería. Además de droga en cantidades más pequeñas por toda la estancia, en una caja encontraron veinte placas de matrícula.
