El Basque Culinary Center de San Sebastián arrancará el curso académico el próximo 3 de septiembre, garantizando la seguridad

El Basque Culinary Center (BCC) de San Sebastián arrancará el curso académico el próximo 3 de septiembre con novedades «significativas» para «garantizar la seguridad y el aprendizaje de sus estudiantes» frente a la pandemia del coronavirus.

El Basque Culinary Center (BCC) de San Sebastián ha informado que los estudiantes del Grado en Gastronomía y Artes Culinarias y de los ocho másteres se irán incorporando de manera escalonada, a lo largo del mes de septiembre, en un curso lleno de novedades y medidas de seguridad propiciadas por la situación generada por el covid-19.

Según ha apuntado, habrá estudiantes formados específicamente en Protocolos contra el covid-19, menos alumnos por grupo, enseñanza más personalizada, incremento de la formación práctica sistemas específicos de protección, más espacio entre personas y nuevas dinámicas de aprendizaje conforman el resumen de las principales medidas.

También se han revisado y adaptado los aforos de todos los espacios. Por otra parte, el Basque Culinary Center (BCC) de San Sebastián ha evolucionado su metodología y modelo educativo, basado en el aprendizaje práctico y experimental, para asegurar que, sea cual sea el escenario, los estudiantes puedan continuar con su experiencia formativa.

Además, se complementará la formación presencial con la formación online personalizando el aprendizaje. El director del Basque Culinary Center (BCC), Joxe Mari Aizega, ha afirmado que «ante una situación como la vivida durante este curso académico, BCC está preparado para que los alumnos y alumnas puedan continuar su aprendizaje preservando los elementosesenciales de su modelo educativo».

Todos los estudiantes recibirán dos formaciones específicamente diseñadas para empresas de restauración, una en higiene y seguridad alimentaria, y la otra en adaptación de procesos relacionados con la prevención del covid-19. En este sentido, estos protocolos serán decumplimiento obligatorio en el centro.

Entre otras medidas, también ha destacado el uso obligatorio de EPIs específicos en cocina y sala, refuerzo de la limpieza y desinfección de las instalaciones, ambientes y materiales una vez que hayan terminado las sesiones de formación, y redefinición de accesos y tráfico de personas por las instalaciones de manera que se reduzca el tránsito por el mismo.

Además, se han instalado puntos de gel hidro-alcohólico en todas las aulas, talleres y espacios comunes, y se ha procedido a la adquisición de más de 60.000 mascarillas para los estudiantes como el profesorado, asegurando el suministro de EPIs desde septiembre hasta finales de año.

Asimismo, los profesoras y el personal de apoyo que tienen un contacto directo con los estudiantes recibirán una formación específica que les permitirá ajustarse a la perfección a las nuevas necesidades de higiene y seguridad, y se realizarán tests periódicos de control. Los estudiantes contarán con un servicio gratuito de orientación médica telefónica o por video-llamada las 24 horas del día, siete días a la semana, para poder realizar consultas a un médico/a y obtener orientación sanitaria.

En relación con las medidas económicas se ha flexibilizado la política de devoluciones y cancelaciones del curso académico 20/21 así como los pagos a través de cuotas periódicas. Aizega ha señalado que «se han adoptado medidas especiales que consisten en la financiación de matrículas a través de acuerdos que ha establecido el BCC con diferentes entidades financieras». Además, el centro cuenta con becas propias para estudiantes del Grado en Gastronomía y Artes Culinarias.