El alcalde de Ordizia, Adur Ezenarro, hace un llamamiento a la calma

El alcalde de Ordizia, Adur Ezenarro, ha hecho un llamamiento a la «calma». Ha asegurado, en declaraciones a EFE, que se trata de un posible foco «localizado» en principio en un único bar del municipio, un «pub», que tiene una «clientela muy específica» ya que es frecuentado fundamentalmente por jóvenes.

Ha explicado que el sábado recibieron el aviso de que el único vínculo existente entre varias personas que habían dado positivo en COVID-19 podía ser este establecimiento por lo que se ordenó su «cierre inmediato», al tiempo que sus trabajadores fueron citados el domingo para ser sometidos a pruebas PCR en el Hospital de Zumarraga.

El alcalde ha afirmado que los casos positivos vinculados con este brote podrían ascender a siete, tras los tres que se confirmaron en la jornada de ayer. Todos ellos están «asilados».

Ha señalado que el domingo «por precaución», en coordinación con Salud Pública, se decidió cerrar otros tres bares ubicados también en la calle Etxezarreta, una de las más concurridas de la localidad, aunque ha subrayado que no tienen constancia de que haya ningún caso positivo relacionado con estos locales. El primer edil ha explicado que las pruebas realizadas a los trabajadores de todos estos establecimientos serán «determinantes» para conocer si existe una transmisión colectiva o no.

El alcalde ha señalado que se estima que se realizarán «cuatro test cada cinco minutos» y recuerda a los vecinos que es necesario ponerse en contacto primero con el ambulatorio antes de ser sometido a la prueba PCR. Ezenarro considera que la jornada de hoy será «clave» para determinar el alcance de este posible brote en esta localidad del interior de Gipuzkoa, que cuenta con unos 10.000 habitantes.