«Vamos a por el segundo crío, eso seguro»

No saben por qué, pero el caso es que esta pareja de guipuzcoanos de 38 y 36 años, (ambos prefieren mantener el anonimato) quería tener niños a toda costa y no conseguían que ella quedara embarazada. Acudieron a Quirón, a la unidad que preside Koldo Carbonero, que les dio varias opciones para ayudarles en su empeño de ser padres. No tuvieron que esperar mucho... A los cinco meses ella se quedó embarazada después de que los médicos utilizaran la técnica que consiste en extraer óvulos y fecundarlos uno a uno con una inyección espermática. El padre de ese niño que ahora tiene siete meses y que es «un buenazo» no podía creer que, después de tanto tiempo, el ansiado bebé fuera a nacer. «Ni la lotería te haría tan feliz. Pero soy muy precavido, no quería hacerme ilusiones porque conocía parejas que había tenido un aborto a los cuatro y cinco meses y estaban destrozados. Si eso nos pasaba a nosotros después del tratamiento... no quería ni pensarlo». El caso es que el pequeño llegó a casa de esta pareja que tiene claro que va a ir a por el segundo, «por vía natural y si no con las técnicas que tan buen resultado nos han dado».