Julie Andrieu: «La cocina del día a día explica cómo somos»
Julie Andrieu recibe su premio con un elogio a la gastronomía de verdad. Los chefs vascosy galos resaltan su conexión
Amo hablar de la cocina diaria, la de las familias, la que constituye la base de nuestra cultura, porque esa cocina de lo cotidiano es la que mejor explica quiénes somos». Lo dijo la televisiva Julie Andrieu al recibir su premio y su voz resonó en el auditorio del Kursaal. La mujer de apariencia amable pero ideas claras retumbó en un congreso que analiza las nuevas tendencias y las últimas creaciones. La dama que recorre las cocinas francesas con sus documentales ensalzó la cocina verité aplaudida, entre otros, por Juan Mari Arzak y Pedro Subijana, que subieron al escenario para dar más realce al galardón de periodismo gastronómico que lleva el nombre del recordado Pau Albornà.
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El viceconsejero de Comercio y Turismo del Gobierno Vasco, Jesús García de Cos, entregó el premio y reivindicó también la importancia de la gastronomía. Andrieu apuntó estar «muy emocionada por un premio que viene de España, ya que los españoles también me dan calor y sé que mis programas se ven mucho aquí». La divulgadora televisiva confesó que su objetivo al hacer su trabajo «es conseguir que se hable de cocina». En palabras del galardonado en la edición anterior, el crítico Ignacio Medina, «Julie menciona en cada programa de lo que hablamos hoy en día en la cocina: de producto, de productor, de respeto, de sostenibilidad y de recuperación del gusto por la cocina».
Fue otra de las conexiones de un San Sebastian Gastronomika - Euskadi Basque Country que siguió profundizando ayer en las conexiones entre las cocinas de los dos lados de los Pirineos, con la vistosa traca final protagonizada por Marc Veyrat, de La Maison des Bois, y alcanzó uno de sus momentos más divertidos e intensos con la mesa redonda en la que participaron Elena Arzak e Hilario Arbelaitz moderados, o más bien espoleados, por David de Jorge, con presencia de una leyenda como Pierre Gagnaire a través de una conexión exterior. El galo pasó revista a los productos y recetas que le han inspirado a lo largo de su dilatada carrera, mientras que los vascos dijeron cómo aprendieron peregrinando al país vecino para aprender las bases de la gran cocina clásica. «Francia nos enseñó a ser modernos», dijo David de Jorge.
El polémico Marc Veyrat devolvió los elogios al afirmar que «España nos ha enseñado mucho sobre creatividad». El cocinero que renunció a las estrellas para retirarse a la granja familiar habló del cambio de valores en la gastronomía actual. «Los jóvenes ya no quieren estrellas». Y apuntó uno de los problemas más acuciantes del sector: «Nos faltan diez mil empleados en la hostelería». Es una constante que se está repitiendo en el congreso, especialmente por los franceses, donde la falta de personal en la hostelería es ya un problema nacional, como por los cocineros españoles.
Hubo mucho más ayer en una intensa jornada en la que los cocineros galos se alternaron con el catalán Paco Pérez, del Miramar de Llança, o Pablo González-Conejero, de Cabaña Buenavista de Murcia. También Jordi Butrón y Ricardo Martínez, de Essence by Espai Sucre de Barcelona, o Jesús Sánchez, del cántabro Cenador de Amós, presentaron sus ponencias.
Hoy se celebra la última jornada con una de las citas más populares, el concurso de parrilla, y la presencia, entre otros, del peruano Virgilio Martínez, que presentará la última ponencia del congreso. También esta tarde se conocerán los primeros datos oficiales de balance por parte de la organización, pero los primeros avances apuntan que los resultados han mejorado las previsiones. «El mundo de la cocina tenía ganas de reencontrarse y lo estamos logrando, con todas las medidas de seguridad pertinentes pero con la energía que nos caracteriza», según Roser Torras.