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Ane Bergara
Miércoles, 5 de febrero 2025, 07:58
El champán es sinónimo de lujo y exclusividad. Este vino espumoso que se elabora en la región homónima francesa (Champagne) y desde tiempos inmemoriales ha estado ligado a las capas más altas de la sociedad. Se trata de una bebida que fascina a quien le gusta y que ofrece un amplio espectro de aromas y sabores capaces de cautivar a todo el mundo. Pero muchos de ellos son desconocidos para el gran público o no conocemos exactamente su procedencia.
A continuación, te mostramos qué tipos de champanes existen, cómo se elaboran y el porqué de sus nombres.
Las distintas denominaciones vienen dadas por las uvas utilizadas, o el dulzor que contiene, aunque también hay denominaciones relacionadas con la ubicación, las burbujas, la añada o el tiempo en barrica.
Las uvas que se cultivan en la región de Champagne son la chardonnay, la pinot noir y la pinot meunier. Obviamente, son estas las que se emplean para elaborar el espumoso más famoso del mundo.
El Champagne Prestige Cuvée es el más prestigioso de todos. Es el de mayor calidad y su producción se basa en diferentes tipos de uva. No es un monovarietal.
El Blanc de Noirs es el que se elabora a partir de uvas tintas con la pulpa blanca, como es el caso de la pinot noir. Por eso se emplea ese nombre que traducido vendría a ser blanco de negros.
El champán Blanc de Blancs es un monovarietal de uva chardonnay blanca.
El Rosé es un champán rosado que surge a partir de la mezcla de distintos tipos de champagnes tintos y rosados o macerando el mosto de uvas.
Es habitual ver las palabras Brut o Sec en un champán. Estas, como otras, hacen referencia al dulzor que tiene el vino.
El Brut Nature es aquel que no excede de los 3 gramos de azúcar por litro. El Extra Brut puede llegar a los 12 gramos. El Brut tiene entre 6 y 12 gramos por litro. El Extra Sec, entre 12 y 17 y el Sec se mueve en cifras que van de los 17 a lo 32 gramos por litro.
El Demi-Sec puede incluir de 33 a 55 gramos de azúcar por litro y el Champagne Doux es el más dulce de cuantos podemos encontrar y se va por encima de los 50 gramos por litro.
Como es lógico, una denominación se añade a la otra. Es decir, podemos tener un champán Prestige Cuvée Brut Nature o uno Blanc de Blancs Doux. Además, a todo esto caben añadir otras denominaciones que estamos acostumbrados a ver inscritas en las botellas y que aportan otro tipo de información. Millésime se emplea para indicar que procede de una añada considerada excepcional. Non Vintage quiere decir que no tiene una añada concreta, sino que se han mezclado vinos de diferentes cosechas antes de dejarlo envejecer durante al menos 15 años.
El Vintage indica que son de la misma añada y han envejecido un mínimo de 36 meses. El Grand Cru lo hallarás en la etiqueta si todas las uvas empleadas para su elaboración proceden del mismo viñedo, mientras que Crémant es un champán con menos gas y burbujas debido a que han fermentado menos tiempo en la botella.
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