¿Cuántos tipos de cruasanes conoces?

Para desayunar, merendar o como postre, cualquier momento del día y excusa son buenos para disfrutar de un cruasán. Cuando te entra el capricho y vas a comprar uno, ¡qué difícil elección! Hoy en día hay multitud de opciones para elegir: con relleno, sin él, con cereales, de mantequilla… descubramos las diferentes versiones que existen de este popular bollo.

Pero antes, cabe mencionar que el cruasán es uno de los símbolos de la gastronomía dulce de Francia. Un bollo con mucha historia que ha logrado popularizarse en el mundo entero. Ello ha propiciado que hayan surgido multitud de versiones diferentes de la receta, ya que, al igual que ocurre en otros ámbitos, la gastronomía y la repostería también han de ir adaptándose a los nuevos tiempos. De ello se han encargado a lo largo de la historia multitud de panaderos que han ido creando diferentes tipos de cruasanes, algunos de ellos muy aclamados por los consumidores.

La versión original y francesa de este bollo se elabora con un exquisito hojaldre de mantequilla del que resulta un interior esponjoso y un exterior muy crujiente una vez se ha tostado. Un bocado delicioso y dulce a partes iguales que suele adquirir una forma recta y no de media luna.

Los cruasanes con forma de media luna, aquellos que tienen los tan deseados cuernos en los extremos, suelen elaborarse, no con mantequilla, sino con manteca de cerdo.

La versión argentina del cruasán ha calado hondo y hoy en día los cruasanes argentinos son uno de los bollos más demandados en muchas pastelerías y panaderías. También denominados medialunas o facturas, son ligeramente más finos que el resto y tienen un sabor dulce más intenso.

Una alternativa saludable son los cruasanes multicereal o integrales, ya que disponen de mayor cantidad de fibra, minerales y vitaminas en comparación al resto. Son muy crujientes y pueden rellenarse al gusto.

Gianduja es un tipo de bombón de chocolate con avellana, lo que nos da pistas sobre cómo es este bollo: un cruasán con sus cuernos bañados y su interior relleno de este tipo de chocolate italiano. Un sabor y textura únicos.

Aunque el anterior también se puede enmarcar en esta categoría, los cruasanes rellenos son un grupo tan versátil como amplio, ya que entre los rellenos se pueden encontrar tanto versiones saladas (con el jamón york y queso como la elección estrella) como dulces: chocolate (negro, blanco o con leche), crema pastelera, dulce de leche, crema de avellanas, crema de pistachos, queso y frutos rojos, coco… ¡para no aburrirse nunca!

Todo cruasán tiene una versión 'petite', una réplica en miniatura que también triunfa mucho en todas sus vertientes.