De templo histórico de los 60 a estadio del siglo XXI: el impresionante campo del Levante
Tras varios años en la élite de forma continuada, el Levante apostó en 2019 por adecuar su estadio a su puesto en LaLiga Santander. Una obra que ha sido planteada en dos fases y que busca mejorar el templo levantinista de cara a la vuelta de sus aficionados
Jacobo CastroDesde hace más de 50 años, el barrio valenciano de Orriols cuenta con un vecino muy querido. En 1969 el Levante Unión Deportiva se trasladó a esa zona de Valencia, dejando el viejo estadio de Vallejo para dar vida a su nuevo templo, el Estadio Ciutat de València. En este histórico feudo se han vivido ascensos, descensos, partidos europeos… Los aficionados levantinos han sido testigos allí de los goles del “comandante” Morales o de Roger Martí, del despegue de Keylor Navas, de la calidad de Iborra o Rivera y hasta del paso de Pedja Mijatovic por el club granota. Incluso se llegó a ver a Johan Cruyff vistiendo la camiseta del Levante. Aún con ese glorioso pasado, es bastante probable que el estadio granota esté contemplando uno de los mejores momentos de su larga vida, con su equipo instalado de manera firme en la élite del fútbol español, creciendo de manera innegable año tras año.
La directiva del Levante UD inaugura las obras del estadio Ciutat de València el 5 de agosto de 1968.
Ese crecimiento que se ha experimentado en el césped debe extenderse a todas las ramas del club, y el estadio no es una excepción. Los años pasan para todos y el Ciutat de València necesitaba adaptarse a la época. Unos cambios que el Levante ya ha puesto en marcha y que prometen convertir el templo de todos los levantinistas en una de las banderas que muestre el crecimiento de esta entidad centenaria.
Una adaptación necesaria
El Levante necesitaba adaptar el estadio a los patrones de las retransmisiones televisivas y mejorar la experiencia de los aficionados
El Levante tenía claras sus necesidades: mejorar la experiencia de los aficionados y adaptar el estadio a los patrones de las retransmisiones televisivas de LaLiga. Para lo primero, se planteó una modernización de varios elementos. “Con la nueva cubierta vamos a ofrecer un mayor confort a los espectadores con una mejor iluminación, megafonía y dos videomarcadores de grandes dimensiones. Esto va a contribuir a crear un clima de entretenimiento que fomente aún mas las asistencia al estadio. Además, cuando la reforma esté completa se mejorará sustancialmente las líneas de negocio del estadio, tanto los días de partido como los de no partido”, comenta Luis Cervera, director de Operaciones y Proyectos del Levante UD.
Por otro lado, ha habido que llevar a cabo otro tipo de cambios para mejorar las retransmisiones televisivas desde el estadio. “La iluminación era de baja intensidad y muy desigual. Además, la cámara aérea no se podía poner porque la altura del estadio no era suficiente para ella (necesita 21 metros). Incluso teníamos que retirar la anterior cubierta, que era de amianto y muy antigua”, explica Cervera.
Estos motivos impulsaron una reforma muy necesaria. “El estadio era bastante antiguo, de los años 60. Más allá del graderío, que lo habían reformado hace poco y era bastante atractivo, carecía de todo lo necesario en un estadio del siglo XXI”, comenta por su parte César Azcárate, director del Área de Arquitectura Deportiva de IDOM, responsables del proyecto.
Una reforma en dos fases
La reforma se programó en dos fases. La primera se centraría en todo lo relacionado con el cumplimiento del reglamento de televisión de LaLiga y la segunda iría orientada a reorganizar todos los espacios interiores del estadio. De las dos, la primera ya ha sido terminada. “La concluimos hace unos meses. Consistía en implantar una cubierta que nos hiciese ganar en altura, y a partir de ahí instalar una nueva iluminación de nivel 4k, una nueva megafonía, unos nuevos videomarcadores y la cámara aérea. Esta nueva cubierta genera también un mayor confort a los aficionados, al permitir que todos todos los espectadores estén a cubierto”, explica Luis Cervera.
Un proceso que no ha sido nada fácil, ya que la colocación de la nueva cubierta ha supuesto un gran reto. “Costó crearla y además hay que tener en cuenta que tenía que albergar esos elementos necesarios para una buena retransmisión: iluminación, altura para la cámara aérea… etc. Pero el principal problema era establecerla en el campo. Para eso hemos usado una tecnología de estructura bastante avanzada. Una cubierta ligera de cables, que pesa poco y que tuvimos que apoyarla en unos pilares que creamos fuera de la estructura original”, resume César Azcárate.
La segunda fase, que aún no ha comenzado, se centra en el aprovechamiento de todos los espacios interiores del estadio. “Con esto buscamos conseguir una calidad mejor en los espacios deportivos, prensa, hospitality, mantenimiento, etc.. Por otro lado, también queremos facilitar la generación de nuevas líneas de negocio con el uso de nuevos espacios para fines comerciales. Deseamos que el estadio genere actividad los días de partido y de no partido. Que sea posible tener, además de la tienda del club, otras posibilidades como un restaurante, el museo del club, el tour del estadio, etc., como hacen otros estadios”, afirma Cervera. Además, añade que este otro proceso de la obra también incluye “una mejora en la fachada del estadio”.
La influencia de la pandemia en los tiempos de la obra
El Levante inició la primera fase de las obras de su estadio el 1 de julio de 2019. Ocho meses después, España entró en estado de alarma y el gobierno decretó el confinamiento por la pandemia del Covid 19. “Los trabajos iniciales de la obra se basaron en el refuerzo de pilares (cimentaciones), por lo que en la parte final de 2019 y principios de 2020 podíamos seguir teniendo público sin problemas. Nuestra idea era acabar la temporada 2019/20 y que en el verano de 2020 la maquinaria de obra se colocase ya dentro del estadio, en el terreno de juego, y acometiese la colocación de la cubierta. Con la pandemia, la planificación se nos trastocó completamente”, relata Cervera.
Para hacer frente a este contratiempo y a que, a consecuencia de ello, el final de LaLiga Santander 19-20 se retrasara a junio y julio, el Levante UD tuvo que encontrar un campo alternativo. “O aplazábamos la obra un año para poder jugar en nuestro campo el final de la competición, o buscábamos otro estadio para poder continuar. Al final se decidió buscar un estadio alternativo para jugar las últimas jornadas (La Nucía) y permitir que la obra avanzase. También tuvimos que empezar esta nueva temporada jugando algunos partidos fuera y utilizando en un par de partidos el estadio de La Cerámica, que nos prestó amablemente el Villarreal CF, para jugar de locales”, afirma.
El futuro de los estadios
El Ciutat de València es uno más de los muchos estadios que se están modernizando en nuestro país, una dinámica que viene impulsada por LaLiga. “En España se están reformando estadios y, en menor medida, construyendo algunos nuevos. La labor que está haciendo LaLiga es fantástica, tratando de que se modernicen para unificar la calidad de las retransmisiones y tener un patrón audiovisual común”, explica César Azcárate. Además, LaLiga no solo impulsa a los clubes a realizar estos cambios, también los asesora. “Cuentan con un departamento muy profesional de infraestructuras que nos ha ayudado y asesorado durante todo este proceso”, afirma Luis Cervera.
César Azcárate no sabe cuáles serán las próximas innovaciones en este gremio, pero señala la pandemia del Covid 19 como un elemento que determinará las próximas evoluciones. “Esto nos está afectando a todos los órdenes de la vida y va a hacer que las ciudades y los edificios del futuro cambien totalmente. Los estadios son grandes infraestructuras dentro de una ciudad, y cuando no se usan para el deporte, estaría bien que tuviesen un uso para, por ejemplo, hospitales de campaña o lugares de vacunación masiva. Y eso solo se va a conseguir planteando estructuras más flexibles. Por otro lado, se puede buscar hacerlos más sanos y más ventilados. Son ideas que deben estudiarse con tiempo. La vida post Covid es el gran reto que tenemos de cara al futuro”, concluye.
Mientras esas ideas sobre recintos deportivos futuros se acaban plasmando en propuestas y procedimientos completos, los estadios de LaLiga siguen su imparable modernización. El último, el Ciutat de València, que de histórico templo nacido en los años 60 está en proceso de convertirse en un estadio del siglo XXI para que sus aficionados sigan disfrutando de esa grandeza de espectáculo y entretenimiento que es el fútbol.
