Nicolás de Miguel: «San Sebastián debe recuperar músculo cívico e ilusión»

-Son nuevos en la política municipal ¿Qué es Ciudadanos?

- Es un movimiento compuesto por ciudadanos de clase media y trabajadora (médicos, camareras, letrados, economistas...) que sacan de su tiempo y de su hacienda para dedicarse a la política. No tenemos sede. Queremos devolver la credibilidad a la política, porque está claro que no pueden regenerarla quienes llevan décadas en ella.

-¿Cambio o recambio?

-Somos el cambio sensato, un partido con ideas nuevas y modernas. Otros son nuevos también, pero traen discursos muy viejos.

-¿Qué quiere C's hacer en el Ayuntamiento?

-San Sebastián tiene que recuperar músculo cívico, ilusión. Ha sido una ciudad profundamente europea y abierta a España. Nosotros no vendemos quimeras, sino cosas se pueden realizar. En el ámbito social, no puede existir pobreza energética. Para ello tenemos que fomentar la riqueza. Hay que eliminar todas las trabas que asfixian los negocios. Fomentar el desarrollo de la ciudad, hacer de San Sebastián un verdadero escaparate internacional que sea referencia no solo del pintxo, sino por ejemplo de la defensa de los Derechos Humanos. El ciudadano es pieza angular de todo nuestro discurso. Venimos a resetear el sistema.

-Les oí decir que quieren desparasitar la administración ¿Han detectado algún bicho en el Ayuntamiento donostiarra?

- (Risas) Hay que reducir a su mínima expresión los cargos de confianza y utilizar en todo lo que se pueda a funcionarios de carrera. Hay que acabar con el amiguismo y el coche oficial.

-¿Tenemos derecho al TAV?

-Es ridículo hacer tramos que es seguro no van a ser viables. Otra cosa es desarrollar el eje Atlántico. Decimos sí al AVE, siempre que no sea un tren de cercanías. Y estamos a favor de infraestructuras como el Metro.

-¿Lograrán los 4.000 votos que necesitan para tener un edil?

-Han sido cuatro años de no gobierno de la ciudad, de incapacidad. Se ha visto que a Bildu le venía grande San Sebastián. Vamos a intentar hacer un papel digno.