Feijóo pide el voto para el 9-J porque apostar por el PNV «es perder»

Como si se tratara de una partida de ping-pong, PNV y PP llevan días lanzándose pullas dialécticas de un lado al otro del tablero, en este caso electoral y con la vista puesta en el próximo 9 de junio. Y ayer fue el propio Alberto Núñez Feijóo, en una visita a Euskadi para arropar a los candidatos vascos del partido conservador –Javier Zarzalejos y Carlos Iturgaiz– quien devolvió a los jeltzales la pelota. «Como creo que aquí hay un interés deportivo y competitivo muy alto, estoy acostumbrado a ver a los vascos que ganan, no a los vascos que pierden», aseguró el presidente del PP, que avisó que votar al PNV en los comicios europeos «es perder».

Feijóo contestaba así a Andoni Ortuzar, que el miércoles llamó «caradura» a Zarzalejos y dijo que el PP «no se merece ni un voto vasco». Unas declaraciones que venían precedidas por las críticas que lanzó el candidato popular, que culpó a los jeltzales del retraso en la llegada del TAV. Un toma y daca al que se acabó por sumar ayer Feijóo. «Los vascos van a votar a quien les dé la gana», espetó el líder del PP, que apeló al voto a su partido de los vascos que, dijo, «quieren ganar» y no desean apoyar «a un socio» de Pedro Sánchez.

A unos kilómetros de distancia, PNV y EH Bildu compartían ayer casi escenario para sus respectivos actos de campaña. Pamplona fue la localidad elegida en la que ambas formaciones defendieron sus postulados de cara a una cita con las urnas que también se antoja reñida entre los dos partidos vascos. La aspirante de la formación jeltzale, Oihane Agirregoitia, estuvo ayer acompañada por el presidente del Parlamento de Navarra, Unai Hualde o la senadora Uxue Barkos, entre otros. La aspirante de la coalición CEUS se comprometió así a defender en Bruselas el Convenio y a «ser la voz» de Navarra en el Europarlamento. Horas antes, en un acto en Vitoria, Agirregoitia apostaba por una reindustrialización basada en «el talento y la tecnología» para relanzar la competitividad de la UE.

A unos metros de distancia, Arnaldo Otegi defendía que «el voto de EH Bildu es un voto por la democracia y contra el autoritarismo en Europa». «El nuestro es el voto de la paz y de la soberanía de los pueblos; es un voto que proclama que Euskal Herria es una nación; un voto sin complejos que tiene, además, una misión estratégica para nuestra nación: llevar a un embajador de Euskal Herria a Bruselas», sostuvo el coordinador general de EH Bildu en alusión a Pernando Barrena, quien sostuvo que «Europa tampoco es inmutable y sí se puede construir un dique de contención real al auge de las derechas extrema». Lo dijo acompañado de representantes de ERC y del BNG, que juntos conforman la coalición Ahora Repúblicas.

Por su parte, Idoia Mendia, candidata por el PSE, advirtió desde Ermua que el próximo 9-J se votará «si hay una Europa más social» o, por el contrario, si PP se deja «arrastrar» por Vox para «retroceder al siglo pasado».