Hostelería y construcción coparán la mayoría de permisos a inmigrantes que tramitará Euskadi

Por lo pronto, el Ejecutivo autonómico espera que el traspaso permita que 5.000 personas a las que Lanbide imparte formación «puedan firmar un contrato», y dejen de estar «condenadas a trabajar en la economía sumergida». Los sectores económicos de la hostelería, construcción y sus gremios, servicios y transporte guipuzcoanos serán los principales beneficiados de esta transferencia, ya que vienen acusando la escasez de mano de obra desde hace varios años. Kino Martínez, secretario general de la Asociación de Hostelería de Gipuzkoa, valora como un «gran avance y un puntazo» la citada transferencia, y agrega que «sin duda va a facilitar bastante el trabajo administrativo».

Cabe añadir, en esta línea, que alrededor de dos de cada diez extranjeros afiliados a la Seguridad Social trabajan en el sector de la hostelería, según los últimos datos, y que entre el 20% y el 30% del total de nóminas corresponden, igualmente, a foráneos. Por ello, Martínez opina que «varios establecimientos estarán interesados en incorporar trabajadores» a través de estos permisos de trabajo. Además, la Asociación de Hostelería de Gipuzkoa también «lleva trabajando años en la formación de personas inmigrantes», subraya Martínez, quien añade que «tenemos muy buena relación con Extranjería, que ha facilitado mucho nuestras tareas, y ha agilizado nuestras solicitudes».

En resumen, el Gobierno Vasco tendrá ahora la capacidad de entregar permisos de trabajo, aunque la residencia todavía queda en manos del Gobierno central. De esta manera, el Ejecutivo autonómico tendrá la capacidad de controlar dos procedimientos, como las 'contrataciones de origen' y en las ocupaciones con difícil cobertura, lo que les permitirá generar algunos procesos «en base a las necesidades del mercado laboral de una forma más ágil», explican. Esto también facilitará el acceso en «otros sectores tensionados además de la hostelería, como el transporte, la construcción y la industria».

Precisamente, el sector de la construcción y sus gremios, donde trabaja en torno al 15% de extranjeros en Gipuzkoa, según los últimos datos de afiliación a la Seguridad Social, es también otra de las áreas económicas que más acusa la escasez de mano de obra. Txema Muñoz, presidente de la Asociación de Constructores de Gipuzkoa, Ascongi, señala que el sector recibe «con los brazo abiertos» cualquier medida que pretenda agilizar largos trámites administrativos como el permiso de trabajo. Y para ilustrar esta dificultad detalla que Ascongi «hemos trabajado durante más de tres meses para regularizar a un inmigrante senegalés». La transferencia a Euskadi permitirá, previsiblemente, acortar estos plazos.

El pasado mes se registraron 33.220 cotizantes extranjeros en Gipuzkoa, lo que supone 354 menos que en octubre, aunque si se compara con un año antes, nuestro territorio gana 1.239 afiliados extranjeros, mientras que Bizkaia 3.241 y Araba 1.396. En concreto, en torno al 10% de los afiliados en Gipuzkoa son foráneos.

Además, este último traspaso se suma a la aprobación del nuevo reglamento de la Ley de Extranjería realizada en el mes de noviembre por el Consejo de Ministros con el objetivo central y urgente de «agilizar» su regularización y entrada al mercado laboral para paliar la falta de mano de obra, al mismo tiempo de «mejorar» su acogida y adaptar el sistema a la realidad del país. El objetivo del Gobierno central es que, con esta reforma, puedan regularizarse de media 300.000 personas al año de aquí a 2027, 900.000 en total.