«No hemos dejado de sacar adelante iniciativas pese a la falta de mayorías»

Ausencia de mayorías. Desde que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ganó la moción de censura en junio, el PSOE gobierna con una ausencia de mayorías. Cuando Calviño fue preguntada por su intención de llevar adelante la agenda del cambio que plantea su gabinete, aseguró que desde que su partido está en el Gobierno, «se da una situación paradójica. No dejo de escuchar que hay una parálisis política y que no es posible sacar las cosas adelante por culpa de la inestabilidad».

Sin embargo, subrayó, «no hemos dejado de adoptar medidas como la recuperación de la sanidad universal, la mejora de las pensiones más bajas o el refuerzo de los programas de apoyo a la familia». ¿Por qué? «Porque en realidad hay una mayoría social y política que apoya estas medidas y que está a favor de que avancemos en esa dirección. No debemos dejarnos paralizar por que la situación sea difícil», explicó.

Medidas de reducción de gastos fijos. «Estamos por debajo de la media comunitaria en ingresos y en gasto público sobre el PIB», pero «el de la búsqueda de eficiencia y efectividad en el gasto público debe ser un ejercicio constante». Así respondió Calviño cuando fue cuestionada sobre las medidas previstas en la administración. Entre otras cosas, resaltó la importancia de llevar a cabo «revisiones de cómo están produciéndose las distintas políticas, qué tipo de gastos son más eficientes o no y dónde funcionan más los programas», así como «ver si se puede ahorrar gasto en otros ámbitos». «Estoy segura de que todos estamos de acuerdo en que más vale gastar el dinero en educación que en intereses de la deuda», sentenció.

En cualquier caso, «es muy difícil plantearse en nuestro país reducciones sustanciales de gasto público sabiendo que la mayor parte del gasto se debe a educación, sanidad y políticas sociales». En estos ámbitos, indicó Calviño, es donde «hay que invertir más para que nuestro futuro sea más próspero». Por tanto, «hay que huir de las ideas fáciles de que hay un margen enorme para reducir el gasto público de forma sustancial».

Repetición de un escenario de recesión. «España está en una situación mucho mejor que hace una década en muchos ámbitos, por ejemplo en el sector financiero», afirmó la ministra de Economía y Empresa. Por eso, animó a «no mirar solo los elementos negativos. Es verdad que el ratio de deuda sobre el PIB es superior al que teníamos hace diez años como herencia de la crisis, pero hay muchos otros elementos que pueden ser activos si en el futuro tenemos que enfrentarnos a una ralentización económica».

Por otro lado, Calviño no se aventuró a predecir cuáles son las principales sombras que podrían producir una quiebra de la recuperación sostenida de la economía española o de si existe el riesgo de que una incipiente desaceleración pueda abocar a la economía europea y española a repetir un escenario de recesión. Sin embargo, sí apuntó que, en estos momentos, existe el riesgo de «una salida desordenada del Reino Unido de la Unión Europea. La situación evoluciona cada hora y es muy difícil prever qué va suceder, pero tenemos que contribuir a que haya un acuerdo para que sea una salida ordenada y lo menos perjudicial posible». También mencionó el peligro de la inestabilidad financiera, «sobre todo la de la zona euro», y el cambio de signo de la política monetaria.

Presupuestos. ¿Va a haber o no va a haber Presupuestos? Calviño reconoció que esta es una de las preguntas que en más ocasiones le han hecho en las últimas semanas. ¿Y en caso de que el Gobierno debiera prorrogar las cuentas actuales, podría haber un adelanto electoral? La ministra garantizó que el Ejecutivo de Pedro Sánchez trabaja «día y noche para lograr los consensos necesarios para sacar adelante» su plan presupuestario.

De todas formas, «la prórroga presupuestaria se da automáticamente», recordó, «ahora bien, si se prorrogan únicamente los compromisos de gasto asumidos por el Gobierno anterior y no se produce el aumento de los ingresos propuesto por nuestro Ejecutivo, tendremos un déficit público superior al que propone nuestro plan el año que viene». Respecto al adelanto electoral, Calviño se limitó a decir que es al presidente del Gobierno a quien le corresponde convocar elecciones.

Subida de impuestos. «Subir los impuestos nunca es una decisión fácil». Aun y todo, el Gobierno considera que es el momento de actuar, según explicó ayer la ministra de Economía: «Hay que aprovechar para tener una estructura de los ingresos fiscales más sólida y establecer una tasa sobre determinados servicios digitales, porque necesitamos un sistema fiscal que sea más progresivo, más justo y más adaptado a la realidad del siglo XXI». Además, el plan presupuestario «contempla modificaciones dentro de la ley de Presupuestos».

Pensiones. Las pensiones son un tema de actualidad que no podía faltar en un foro empresarial como este. Calviño quiso lanzar el mensaje de que «el sistema de Seguridad Social es sólido». «Lo que estamos viendo a corto plazo es cómo minimizar el déficit previsto para este año para la Seguridad Social y preservar en la medida de lo posible el fondo de garantía que se ha consumido casi totalmente en los últimos años. No hay razones para tener preocupación a corto plazo». Con la vista puesta en el futuro, Calviño hizo hincapié en que pese a la «solidez» del panorama actual, «hay que revisar los elementos de sostenibilidad».