Capital Energy descarta el parque eólico de Ezkeltzu por las exigencias de seguridad aérea
La renovable rechaza recurrir los informes que alertaban de la cercanía del proyecto con el aeropuerto y su afección a los sistemas de radiofrecuencia
Mikel Calvo, Amaia Núñez y Javier Bienzobas (Gráficos)
San Sebastián
Martes, 4 de febrero 2025, 00:08
El parque eólico que Green Capital, filial de la renovable española Capital Energy, planeaba en Ezkeltzu, entre Zizurkil y Usurbil, no continuará su recorrido administrativo ... después de que la propia empresa con sede en Madrid decidiera no recurrir los informes técnicos de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que estimó que los cuatro molinos proyectados en el Hernio podrían afectar a la seguridad de los aviones dada su altura y cercanía con el aeropuerto de Hondarribia. La compañía comunicó al ayuntamiento de Zizurkil su intención de rechazar «definitivamente» la construcción de los aerogeneradores, cuestión que el consistorio celebró ayer puesto que «generaba serias dudas en torno a los daños al paisaje y al patrimonio local».
Publicidad
El organismo estatal Aesa comunicó el pasado mes de junio a Capital Energy que «ciertos elementos» del parque eólico de Ezkeltzu «no serían autorizables», ante lo que la firma presentó alegaciones. Dicha situación llevó a la renovable a pedir a la delegación de Administración Industrial de Gipuzkoa que suspendiera temporalmente la tramitación del proyecto. La alcadesa de Zizurkil, Maite Amenabar, explicó ayer que «nos informaron en diciembre que el Gobierno Vasco había dado por cerrado el expediente al no recibir respuesta de Aesa a las alegaciones de Capital (el silencio administrativo es negativo en estos casos). De todas formas -agregó Amenabar-, la empresa tenía la posibilidad de recurrir, pero ha decidido renunciar definitivamente».
La viabilidad del proyecto residía, principalmente, en la compatibilidad o no de los cuatro aerogeneradores que pretendía enclavar Green Capital entre Usurbil y Zizurkil con elementos concretos de seguridad del tráfico aéreo en Gipuzkoa y del aeropuerto de Hondarribia, definidos como servidumbres aeronáuticas. Entre este tipo de normas se encuentran las dirigidas específicamente para los parques eólicos debido a la posibilidad de que generen interferencias en los sistemas de radiofrecuencia y radares.
La norma establece que los molinos deberán construirse a no menos de 30 kilómetros de los radares primarios y secundarios de los aeropuertos, además de que tendrán que respetar una distancia de 10 kilómetros respecto a los sistemas de radiofrecuencia. Los proyectados en Ezkeltzu se encontraban a menos de 27 kilómetros del aeródromo de Hondarribia, tal y como se desprendió en una respuesta parlamentaria a una consulta realizada por Mikel Otero, del grupo EH Bildu, donde se detallaron las coordenadas de cada molino.
Publicidad
Además, cualquier edificación -grúa, antena, aerogenerador...- que supere los 100 metros de altura se considera como un obstáculo a efectos de la navegación aérea y, en el caso de los molinos de Ezkeltzu, que llegaban a los 121 metros, se requería también de un estudio de afección operativa por parte de la AESA. Así las cosas, la altura de los elementos así como su proximidad con el aeródromo guipuzcoano y la consecuente posible afección a los sistemas de radares han llevado al organismo de regulación aérea a rechazar el proyecto de Capital Energy.
Nuevo frenazo
Este último frenazo se suma al del parque eólico que la compañía noruega Statkraf proyectaba en Aramaio y Eskoriatza, entre Álava y Gipuzkoa. La obra de energía verde, que planteaba la construcción de ocho grandes aerogeneradores de 201 metros de alto y que ocupaba 782 hectáreas, recibió la declaración negativa de impacto ambiental por parte del Gobierno central. El Ministerio para la Transición Ecológica argumentó en su informe que no existían «garantías suficientes» de que el parque eólico y su infraestructura de evacuación «no provocarán un impacto significativo» sobre especies de fauna protegidas y amenazadas, «a pesar de las medidas preventivas y correctoras propuestas».
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión