Los ayuntamientos guipuzcoanos aumentan su deuda en 30,6 millones en el último año

Este incremento de la deuda guipuzcoana rompe con una dinámica de tres años de descensos consecutivos en los que se había pasado de los 164,8 millones de deuda en 2019 a los 96,6 millones de 2022, lo que suponía una reducción del 41%. En cualquier caso, la deuda actual está muy alejada de la que el territorio tenía en 2010 cuando acumulaba casi 315 millones de euros de pasivo.

No obstante, este incremento no es generalizado ni mucho menos. De hecho, sólo 11 de los 88 municipios han visto incrementado su pasivo respecto a 2022, siendo Donostia, con algo más de 64 millones de deuda, la localidad que encabeza esta clasificación y que aglutina el 51% de la deuda del territorio tras experimentar un crecimiento de casi 27 millones en el último año, lo que supone el 88% del crecimiento total.

Lasarte-Oria se ha encaramado a la segunda posición con casi diez millones, mientras que Errenteria, con algo más de nueve, se mantiene en la tercera plaza. Los otros consistorios que han visto crecer su deuda este último ejercicio son Legazpi, Elduain, Irura, Eskoriatza, Deba, Gaztelu, Albiztur y Hernani.

Este último año han sido 42 los ayuntamientos que se han apretado el cinturón y han logrado rebajar su deuda, lo que no deja de ser reseñable si tenemos en cuenta el contexto mundial con conflictos como el de Ucrania u Oriente Medio que tanta incidencia están teniendo en la economía.

Entre estos 42 consistorios que han logrado rebajar su deuda destacan principalmente los de Zarautz (-1,5 millones), Irun (-883.000), Oñati (-786.000), Tolosa (-756.000), Azkotia (-685.000), Ordizia (-628.000), Bergara (-602.000) y Eibar (-538.000) que han conseguido rebajar en más de medio millón de euros su pasivo.

Gipuzkoa es la provincia vasca que más ha incrementado su deuda municipal este último año. Bizkaia también lo ha hecho, aunque en poco más de cuatro millones de euros, mientras Álava, que hasta 2022 era la provincia más endeudada, ha logrado rebajar su pasivo de 122 millones a 114.

Otra cosa diferente es la Diputación Foral de Gipuzkoa que, según este mismo informe de la Agencia Tributaria hecho público, ha logrado rebajar su deuda en algo más de 237 millones de euros, pasando de los 434,7 millones de 2022 a los 197,5 de 2023.

La Diputación de Álava también ha conseguido reducir su deuda de los 586,8 millones a los 543,2, mientras que la de Bizkaia, la que más deuda acumula, crece desde los 2.263,4 millones hasta los 2.295.

En el Estado, el total de la deuda de las entidades locales asciende a 23.317,7 millones de los que 18.144,9 pertenecen a los ayuntamientos; 4.091,4 a las diputaciones, consejos y cabildos insulares; y 1.081,3 millones a entidades locales menores y mancomunidades.