¿En qué trabajan los extranjeros en Euskadi?

Ya no sorprende a nadie oír conversaciones en otro idioma paseando, en el autobús o en la oficina. La inmigración se ha convertido en un fenómeno habitual en nuestras calles. Y también en los centros de trabajo. En Euskadi, 49.954 extranjeros están afiliados a la Seguridad Social. Representan un 5,66% de los cotizantes al sistema, según datos oficiales correspondientes a julio. Un colectivo que la crisis ha reducido sin piedad. Desde el mismo mes de 2008, cuando la crisis empezaba a golpear con fuerza al País Vasco, 4.995 han sido expulsados del mercado laboral (medio millón en el conjunto de España). El servicio doméstico y la hostelería son las actividades que concentran a más ciudadanos nacidos en el exterior. Los rumanos (7.346) constituyen el colectivo de empleados más numeroso que ha convertido en su hogar la comunidad autónoma, seguidos por los bolivianos y marroquíes. Siete de cada diez lleva siete años o más en esta tierra yendo y se han convertido ya en parte habitual de su paisaje.

La época de 'vacas gordas', cuando la economía iba viento en popa, fue un buen reclamo para atraer mano de obra de otros países. El desplome de la actividad y el conseguiente aumento desbocado del paro ya disminuido de forma drástica su presencia en el mercado de trabajo: el número de cotizantes foráneos se ha hundido un 9,1% en Euskadi y un 22,8% en España en apenas siete años.

Dejar atrás el país de origen para llegar a un lugar en el que, por norma general, se es recibido con recelo, cuando no con rechazo, y conseguir además un medio de subsistencia no se antoja tarea fácil. Independientemente de sus procedencias, todos los que llegan se encuentran con el mismo panorama, que por desgracia para nacionales y extranjeros ha empeorado de forma significativa desde el inicio de la crisis. Los que tuvieron la buena fortuna de desembarcar en tierras vascas allá por 2008 encontraron una coyuntura bien diferente a la actual. A mediados de 2015 el desempleo en este colectivo alcanza el 37,9% en la comunidad autónoma, el doble de la media vasca según la EPA, frente al 30,84%, del conjunto de España.

Orígenes y empleos

Dos de cada tres extranjeros que cotizan a la Seguridad Social en Euskadi proceden de fuera de la Unión Europea. Bolivianos (3.749), marroquíes (3.675), chinos (2.753), colombianos (2.636), paraguayos (2.411) y nicaragüenses (2.276) destacan entre ellos. Sin embargo, la nacionalidad que sobresale por encima de todas las demás es la rumana (7.346). Estos europeos del Este superan con holgura al resto de procedencias. Dentro de la UE, los más numerosos detrás de ellos son los portugueses (3.438) y franceses (1.299).

Los que encuentran un espacio en el mercado de trabajo lo hacen sobre todo en el sector servicios. En muchos casos, en ocupaciones de escasa especialización que los autóctonos tienden a rechazar, pero en las que existe una notable demanda de empleo. Más de 12.000 inmigrantes -en su inmensa mayoría, mujeres- trabajan en actividades relacionadas con el servicio doméstico y la atención a ancianos y discapacitados. Esa cifra supone un 28,92% de los afiliados al régimen general. Le siguen la hostelería (7.162) y el comercio y la reparación de vehículos (4.060) ocupan a más de la mitad de esos 'privilegiados'. Si a estos se le suman la industria manufacturera (3.919), la construcción (2.951) y las actividades administrativas y los servicios auxiliares (2.803), se dibuja buena parte del mapa de dónde consiguen su sueldo cerca de tres cuartas partes de la población extranjera dada de alta en el régimen general de la Seguridad Social.

También los hay que optan por trabajar por su cuenta. De hecho, en el primer semestre del año el 82,62% del total de altas netas en el régimen de trabajadores autónomos en Euskadi fue precisamente de inmigrantes. Aún así, el porcentaje es muy inferior al de los registrados en el régimen general: un 84% frente a un 16%. Cuatro ámbitos engloban al 75% de quienes se emplean por cuenta propia: el comercio y la reparación de vehículos (un 29,31% de los autónomos), la construcción (un 23,29%), la hostelería (un 16,05%) y el transporte (5,15%).

¿Dónde han ido a parar los casi 5.000 inmigrantes que han perdido su trabajo en Euskadi desde el verano de 2008? Aunque las estadísticas no lo concretan, una parte sustancial de ellos ha vuelto a sus países de origen en busca de las oportunidades laborales que no les brinda el País Vasco, otros han pasado a engrosar las filas del paro y el resto ha buscado fortuna en otras comunidades autónomas.