El panderojole Ioritz se nos ha hecho finalista

«No os podéis imaginar la ilusión que me hace jugar esta final», comentaba emocionado Ioritz Egiguren segundos antes de saltar a la cancha del frontón Aritzbatalde de Zarautz para elegir el material con el que el sábado a partir de las once de la mañana buscará el título sénior de la 27ª edición del prestigioso Torneo Bankoa Crédit Agricole-EL DIARIO VASCO.

Jugará con Oier Etxebarria frente a Eneko Labaka y Endika Uriondo el duelo que cerrará el programa. Abrirán la función Leire Garai y Miren Larrarte con su duelo dentro del cuatro y medio, al que seguirá el de promesas entre Murua-Elizegi y Julen Egiguren-Gartzia.

«Mientras venía en el automóvil con mi aita, Ramon, nos hemos acordado de cómo estuvimos en Zarautz en la final que Iñigo Altuna, a quien entrenaba mi padre, disputó en 2003», añadió el delantero tolosarra. «Tenía seis años y vine con el pandero al frontón. Acompañé a mi hermana, Garazi, soinujole. Estábamos en la primera fila y tocamos varias piezas de trikitixa».

Mientras su aita dirigía desde la silla a Iñigo Altuna, sus hijos animaron el ambiente del frontón. Pues aquel pequeñajo no estará el sábado en la primera fila del Aritzbatalde con el pandero, sino sobre la cancha y con el gerriko, dispuesto a calarse una txapela con la que sueña desde entonces, una similar a la que ha visto ponerse a numerosos pelotaris.

«Mi padre fue entrenador de los hermanos Olaetxea, de Iñigo Altuna, de Mintegi, de Egimendia, de Julen Izagirre...», cuenta Ioritz Egiguren. «Con él íbamos toda la familia: mi ama, mi hermana y yo. Se me agolpan los recuerdos. Hemos vivido momentos tan bonitos. De hecho, Garazi sigue viniendo a mis partidos para animarme».

Ioritz expresa el espíritu de la pelota aficionada, del que forma parte el Torneo Bankoa Crédit Agricole-DV. La ilusión por ser pelotari, por aprender, por jugar cada día mejor, por verse acompañado de los amigos. «La cuadrilla vendrá a la final. Me han pedido entradas. Tenerlos cerca supone una alegría enorme para mí».

Los recuerdos de Ramon Egiguren, padre de la criatura, se remontan más lejos todavía, «a la eliminatoria que Egimendia, uno de mis pupilos, disputó con Elola frente a Olaizola II y Barriola, que ganaron aquella edición». La quinta, en 1996. Ioritz no había nacido aún.

Las reservas de entradas de los diez finalistas garantizan una magnífica atmósfera de pelota el sábado en el Aritzbatalde. Suman 456, distribuidas de esta manera: Leire Garai (3), Miren Larrarte (17), Ander Murua (47), Iker Elizegi (99), Julen Egiguren (64), Markel Gartzia (40), Ioritz Egiguren (85), Oier Etxebarria (10), Eneko Labaka (61) y Endika Uriondo (30). Si bien sobresalen los números del asteasuarra Elizegi y del tolosarra Ioritz Egiguren, también cabe subrayar que el poder de atracción del albizturdarra Eneko Labaka continúa intacto pese a tratarse de la cuarta vez que alcanza la final.

Los encargos de particulares también marchan a buen ritmo, por lo que se rondan los 700 para un aforo próximo a los 850. Por lo tanto, quedan a la venta un centenar de localidades de asiento, a ocho euros. Pueden conseguirse a través del número de teléfono 629 935173, bien a través de whatsapp o llamando entre las 20.00 y las 22.00 horas. Las taquillas del Aritzbatalde se abrirán el sábado una hora antes del comienzo de las finales. Además, los menores de 16 años podrán acceder gratis al frontón, si bien deberán seguir de pie los encuentros.