Ander Murua aspira a doblar victoria en Zarautz

El arrasatearra Murua venció en promesas en 2018 al lado del ahora profesional Iker Elizegi. Esta vez lleva la compañía de Aratz Irazustabarrena para intentar doblegar a Hodei Exposito y Morgaetxebarria, vencedor a su vez en 2019.

«Guardo un buen recuerdo tanto de la final que disputé con Elizegi de compañero como del exigente frontón Aritzbatalde», rebobina Murua. «La pelota anda y tomar el mando en el peloteo permite hacer daño en ataque».

Estudiante de Magisterio e IVEF inmerso «en el cuarto de los cinco cursos de este doble grado», Ander Murua atraviesa un buen momento. Lo atestiguan sus recientes resultados, incluido el título mundial sub-24 cosechado junto a Gaskue a finales de octubre. «Estoy contento con mi juego. También he alcanzado las finales del Biharko Izarrak de Mallabia, donde perdí, y del Pebet de Villabona, programada para el domingo 2 de enero».

La suspensión de numerosos torneos originada por las medidas anti-covid y la prohibición de organizar festivales con público truncó en parte su progresión. «Estuvimos parados un tiempo y surgió la oportunidad de jugar el Campeonato de España, que durante dos meses nos dio la oportunidad de disputar un partido a la semana. Me vino bien. Después me convocaron a la selección para el Mundial, lo que me impidió tomar parte en varios torneos. Nos entrenábamos todos los miércoles en Pamplona».

Murua cuenta que «al principio de la pandemia no podía salir de casa y después ni siquiera del pueblo. No había competición y te entrenas sin objetivos, con la esperanza de que se reanuden los campeonatos y los torneos».

No le han faltado obstáculos en la presente edición del Torneo Bankoa Abanca-DV, que en un principio iba a jugar con Gaskue. Truncó la combinación el fichaje del zaguero de Larraintzar por Aspe. Le sustituyó Irazustabarrena.

«Jugamos el primer partido en Beasain contra Hormaetxe-Altuzarra y estuvimos al borde de la eliminación con el 20-21 en contra. Remontamos», relata. «Creo que aquel día no di mi mejor nivel. Me sentí agarrotado. La semifinal frente a Unai Alberdi y Aizpuru en el Beotibar también nos costó. Quizá no fue bonita, pero sí dura desde el inicio. Pegamos muchas chapas».

Ya conocía a Aratz Irazustabarrena. «Formamos pareja en el Memorial Soroa, donde hicimos un buen papel. Es muy pelotari y trabajador. Y además, como bien demostró en la semifinal, sabe acabar el tanto».

En la final del Aritzbatalde les esperan dos rivales potentes. «Exposito y Morgaetxebarria suman mucha pegada. Tienen poder. Los vi en la semifinal del Astelena. Le dan velocidad a la pelota y será difícil arrebatarles la iniciativa en el peloteo. Lo intentaremos».

Desde temprana edad Murua ha destacado por el buen manejo del gancho. «Ese remate da la posibilidad de acabar el tanto. También tomas riesgos, por lo que conviene tener cuidado. En los entrenamientos trabajo tanto el ataque como la defensa. Todavía hay mucho por mejorar».

De su preparación física se encarga el markinarra Gontzal Urionabarrenetxea. «También es el entrenador de profesionales como Elordi, Uriondo, Larunbe...».

Ander Murua no es el único deportista de la familia. Su hermana Irene, de 1,85 de estatura –prácticamente la misma de su hermano– juega a baloncesto... en Estados Unidos. «Tiene 19 años. Es dos más joven que yo. Compite en la liga universitaria con el equipo de Detroit. En su día defendió la camiseta del Araski de Vitoria, pero decidió dar el salto. Compagina los estudios y el basket».