Decepciona el estelar del frontón Anoeta: 22-6

Después de subir y bajar Areitio, Kanpazar y por primera vez Ixua, un ataque en Mendaro que le permitió iniciar la ascensión a Arrate en solitario propició que Txomin Perurena alcanzara en cabeza la línea de meta con 28 segundos de ventaja sobre un trío encabezado por Luis Ocaña.

Por la tarde se disputaba en San Sebastián uno de los cinco festivales de pelota profesional programados para ese día: dos de mano en Anoeta y en Vitoria, uno de remonte en Pamplona y dos de cesta en Gernika y Durango. La expectación era notable en el frontón donostiarra ante un estelar de campanillas: Marcelino Vergara e Hilario Azkarate contra Berasaluze IV y Julián Lajos.

Sin embargo, el juego no sació el paladar de los pelotazales. Ni de lejos. Juan de Eguizale escribió que «acudimos a Anoeta con la intención de ver un buen partido. Y nos llevamos una decepción. No vimos nada en los 47 minutos raspados que duró el encuentro». Berasaluze IV y Lajos arrollaron 22-6 a Vergara I y Azkarate, a quienes en la previa se catalogaba como «pelotaris en forma». Sucedía, sucede y sucederá.

Se aproximaba la inauguración de Galarreta, anunciada para el 5 de abril y para la que se ofrecían distintas sugerencias. Y los pelotazales estaban pendientes de la inscripción para el Manomanista, que se cerraba al día siguiente. En Anoeta, nada más concluir el partido, Julián Lajos confirmaba su participación: «Mañana me tendré que apuntar, que es el último día». También Marcelino Vergara daba por seguro que jugaría.

Varios días después se hacía pública una lista en la que se iba a producir alguna sorpresa negativa. Ausencia ilustre.