El rugby se escapa de París

La cita olímpica también afecta al equipo galo. Su gran figura, Antoine Dupont, se pasa al rugby siete, en busca de una medalla en los Juegos. Su lugar lo ocupará uno de los dos vascos del equipo, Maxime Lucu. El medio melé de San Juan de Luz asume la responsabilidad de dirigir el juego del XV del Gallo, formando una pareja de medios de lujo con su compañero en el Burdeos Matthieu Jalibert. La marcha de Dupont –mejor jugador del torneo en tres de las últimas cuatro ediciones– no supuso la capitanía para Charles Ollivon. El tercera línea de Senpere seguirá siendo, en todo caso, uno de los pilares de su equipo.

La semana en que se ha desvanecido la hipotética opción de que el Biarritz Olympique se instalase en Anoeta, el rugby vasco tendrá su cuota de protagonismo en el Seis Naciones. El proyecto fue rechazado casi por unanimidad (PNV, PSE y Bildu) por el Ayuntamiento de Donostia, propietario del Miniestadio. La idea de que un mecenas iba a destinar 15 millones de euros para remodelar un estadio de propiedad municipal a 50 kilómetros de su ciudad a cambio solo del derecho de uso para partidos de su equipo profesional no ha terminado de convencer a las autoridades.

Francia se mide este viernes a Irlanda, ganadora del título y del Grand Slam en 2023. Su juego colectivo es formidable y afronta el Seis Naciones con un bloque de continuidad, pese a la baja de Jonathan Sexton, figura central del gran XV del Trébol los últimos años. Su eliminación en cuartos de final del Mundial a manos de Nueva Zelanda no refleja su nivel. Un rugby completo, muy difícil de combatir, que funciona como un reloj con un bloque en el que figuran 16 jugadores del Leinster. El imaginativo juego al pie de los franceses, su precisión cuando ataca y su contraataque establecerán el nivel necesario para ganar el torneo. Los galos tienen la ventaja de jugar en casa contra Irlanda e Inglaterra. Los irlandeses visitan Marsella y Londres.

Las demás opciones parecen menores. Inglaterra fue semifinalista en el Mundial, pero parece por debajo de las protagonistas del partido inaugural. Sin Owen Farrell y con un equipo de futuro poblado por jóvenes, tiene la ventaja de recibir a Irlanda, pero visitará Francia, en el último partido del torneo, el sábado 16 de marzo. Escocia, con su juego de pase, es un equipo competitivo mientras que Italia y Gales están lejos de tener alguna opción.

Justo después de un Mundial dominado una vez más por el hemisferio sur, el rugby de siempre vuelve con el Seis Naciones.