'Hardpia' explora nuevos límites en el María Cristina

Había que echarle descaro para presentarse en la gran carrera de yeguas donostiarra sin ganar. Parecía una osadía. Pero resulta que la pupila de Ioannes Osorio galopa, es buena, y reventó la lógica con una actuación que no admite más que reconocimiento. Y su camino no termina aquí, pues su entrenador entiende que le resta bastante progreso.

La de 'Hardpia' es una de esas historias rocambolescas que hacen que el turf sea apasionante. Tras debutar en diciembre, se presentó en Donostia el pasado mes de junio para efectuar su reaparición, pero en el cánter de calentamiento se asustó con el paso y desmontó a Jaime Gelabert, que sufrió una fractura en su muñeca. Si le dicen al joven jinete madrileño que dos meses después iba a volver a San Sebastián para ganar la mejor carrera de yeguas del verano, no se lo cree ni en el mejor de sus sueños.

Pero la potra de Ioannes Osorio ha madurado una barbaridad en apenas dos meses. Es asustadiza y no se centraba, por eso le colocaron tapones y anteojeras. Su entrenador explicaba a este periódico que «no es que no se emplease, siempre ha sido muy honrada en su rendimiento, pero se despistaba con todo».

En un tiempo récord, y sin apenas contraste, empezó a progresar. Su entrenador siempre le tuvo fe y por eso le corrió en el Oaks cuando los resultados no le avalaban. Pero al Duque no le falló el olfato en los entrenamientos de El Soto que nadie ve.

Su yegua empezó a mejorar al centrarse, pero también al correr sobre más distancia. Esa era su carta de presentación. En teoría insuficiente. Además, era la única del lote que no había corrido en la pista. Muchas pegas sobre el papel, demasiado especulativo tal vez. El 14 a 1 que lucía en taquillas así lo atestiguaba. En el otro lado de la balanza, la confianza de Osorio, que no suele errar sus disparos.

Jaime Gelabert ejecutó con maestría la jugada, dando un recorrido impecable a su yegua. El talento siempre se la cayó de los bolsillos, y aunque su cara de niño no la ha perdido, se le nota la madurez que le ha dado el trabajar en un patio tan exigente como el de Osorio. A diferencia de 'Hardpia', los metros jugaron en contra de la de Arizkorreta, más limitada de distancia. Janacek se vació sobre la alazana, sacándolo todo en la lucha, pero aunque la ventaja en meta solo fue de un cuello, Gelabert siempre tuvo la mano ganadora.

La primera veterana en meta fue 'Gnily'. Lamentablemente, la que no pudo dar su nivel fue 'Most Empowered', que según declaró su entrenador sufrió una hemorragia pulmonar con sangrado. Su derrota no le resta ni una pizca del reconocimiento que se ha ganado.