Borrar
Jokin Urretabizkaia 'Basozabal' posa ayer en en las campas de su caserío en San Sebastián. MORQUECHO
«En este desafío está en juego el orgullo, el dinero es algo simbólico»
Herri kirolak

«En este desafío está en juego el orgullo, el dinero es algo simbólico»

El donostiarra 'Basozabal' y el navarro Etxeberria se retan el sábado en Doneztebe en una apuesta con 4.000 euros en juego, con doce kanaerdikos y seis troncos de 60 pulgadas

Lukas Otaegui

Martes, 4 de marzo 2025, 01:00

El donostiarra Jokin Urretabizkaia 'Basozabal' se muestra optimista ante el desafío que afrontará el sábado en Doneztebe ante Joxean Etxeberria II. En juego, 4.000 euros. El trabajo a realizar, doce kanaerdikos y seis troncos de 60 pulgadas –39,8 y de 44,3 centímetros de diámetro–.

La apuesta se cerró el 6 de diciembre en el bar Cantábrico de Tolosa cuando Etxeberria retó a cualquier aizkolari que no fueran Iker Vicente, Mikel Larrañaga, Julen Alberdi, Eneko Otaño u Hodei Ezpeleta. Ahí fue cuando 'Basozabal' decidió dar un paso al frente. «Al principio no tenía intención de ir porque quería tomarme el año tranquilo, pero estaba en la ducha dándole vueltas y me calenté. Llamé al equipo y a la cuadrilla y fuimos para adelante. Tengo bastante gente ayudándome, y entre ellos están Juanito Alkorta y Luis Eraso, que son los que me están apoyando principalmente en este momento, con las hachas, las maderas, el entrenamiento y todo lo que conlleva hacer una apuesta», admite.

No fue fácil cerrar la apuesta. «Nosotros apostábamos por 18 kanaerdikos y él tenía una idea de troncos más grandes –doce oinbikos, de 53,1 centímetros d diámetro– y con más trabajo. Yo me negué porque no me parece entretenido para el público; me gusta más explosivo y rápido que largo y lento». Los pronósticos apuntan a que se invertirá un tiempo de 45 minutos si la madera es «buena» y algo más, incluso pasando de la hora de trabajo», si es una madera más difícil.

Desde que se cerró la apuesta, Basozabal confiesa que ha perdido siete kilos «entrenando en todo tipo de maderas» porque según está recogido en el acuerdo la mayoría de las maderas las va a llevar su rival. «Yo sé qué maderas voy a llevar, que van a ser los seis troncos de 60, pero Etxeberria va a traer los doce kanaerdikos. Estoy esperando a ver con qué tipo de madera viene para saber por dónde atacar o empezar de una forma o de otra».

Reniega del papel de favorito que le quiere colgar Etxeberria. «Lo habrá dicho para quitarse un peso de encima. Lo que tengo claro es que aquí no importa el dinero; está en juego el orgullo».

El camino de uno y otro en los últimos meses les ha llevado a cruzarse en una ocasión. El año pasado Etxeberria fue subcampeón de Navarra, por detrás de Iker Vicente, y cuarto en el campeonato de Euskal Herria, a 58 segundos de Basozabal.

El donostiarra además fue subcampeón del Binakako Urrezko Aizkolari Txapelketa, junto a Ezpeleta, y ganó el Campeonato de Gipuzkoa de segunda categoría.

La experiencia de uno y otro

La falta de experiencia de Basozabal en estas lides es uno de los factores a tener en cuenta. Basozabal solo ha participado en un desafío. Fue en 2019 cuando se impuso a Jon Larrañaga en un reto que consistió en cortar la mayor cantidad posible de hierba en una hora y cuarto y en partir ocho kanaerdikos. «Era un novato. Empecé con el hacha en aquella apuesta. Ahora tengo más trayectoria. Etxeberria tiene más experiencia y jugamos en Navarra que se podría decir que es su zona además él es más diesel, no tiene salida tan rápida pero mantiene un ritmo muy bueno. Yo en cambio, salgo más rápido pero al abusar de ritmo al principio luego lo pago».

La última apuesta de Etxeberria se remonta a 2019. Se midió a Eloy Kortxero. Dos años antes se retó a Xabier Zaldua. Ganó las dos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco «En este desafío está en juego el orgullo, el dinero es algo simbólico»