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Aritz Egea celebra su récord en el desafío al Txindoni a su llegada a Ordizia

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Aritz Egea celebra su récord en el desafío al Txindoni a su llegada a Ordizia J. Marin
Montaña

Aritz Egea bate el récord de Maiora en el desafío al Txindoki

El corredor bate la marca del ciclista de Ormaiztegi con un tiempo de 85 minutos y nueve segundos

Mireia Olariaga

Sábado, 6 de julio 2019, 11:46

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Aritz Egea, el corredor urretxuarra del grupo Salomon, se llevó el nuevo récord de subida y bajada en bici y corriendo al Txindoki con un tiempo de 85 minutos y 9 segundos. Rebajó así un minuto y 17 segundos la anterior marca.

El récord anterior lo impuso Iñaki Maiora, el ciclista de Ormaiztegi que subió de Ordizia a las campas de Larraitz en bici y de allí a la cima de la emblemática montaña del Goierri a pie. Aquel reto tuvo lugar hace 41 años, el 24 de septiembre de 1978. Tardó 86 minutos y 28 segundos en completar el recorrido.

No han sido días nada fáciles para Egea. Hace una semana participó en el maratón de Mont Blanc y desde entonces arrastraba molestias en las piernas que le hacían dudar de su participación. Sabía que estos días previos eran claves para sentirse más seguro y para recuperar sensaciones y al parecer las molestias desaparecieron y pudo acudir a la cita sin ningún problema.

El desafío comenzóa las 10 de la mañana desde el bar Olano de Ordizia, establecimiento que se hizo histórico gracias a lo que hicieron Juan José Rezola e Iñaki Maiora. Se acercaron decenas de personas al sitio de inicio y final para ver cómo el urretxuarra se ponía a prueba y finalmente establecía un nuevo récord. La gente le acompañó durante todo el recorrido. Cientos de aficionados se acercaron al monte Txindoki para apreciar el momento histórico, animar al guipuzcoano y disfrutar del espectáculo en directo en la cima, reviviendo los momentos de 1978.

A la llegada a meta le esperaba Iñaki Maiora, el anterior poseedor del récord, satisfecho y orgulloso con el tiempo que había hecho. «Ha sido un espectáculo, he disfrutado muchísimo con toda la gente animándome, estoy muy contento de haber logrado el récord y de hacer algo distinto a las carreras habituales», declaraba con una sonrisa Egea al finalizar.

También confesaba que, «los vascos somos diferentes, había muy buen ambiente y he hecho una gran bajada. He recordado los momentos de triatlón, ha sido especial».

El recorrido de ida y vuelta estaba dividido en cuatro partes. Consistía en un primer tramo en bicicleta de carretera desde Ordizia hasta Larraitz (7,95 km y 250 m de desnivel). En este punto se efectuaba la transición a la carrera a pie para dirigirse hasta la cima del Txindoki (3,7 km y 990 m de desnivel). Una vez en la cima (1.346 m) empezaba el descenso y tocaba deshacer el camino. El tercer segmento, por lo tanto, constaba de 3,7 km y 990 m de desnivel, para volver a coger la bici en Larraitz y volar hasta el punto inicial en un tramo de 7,95 km y 250 m de desnivel.

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