Honrosa derrota del Delteco GBC en el Palau

Es posible que el conjunto guipuzcoano esté como ese saltador en la plataforma de 10 metros. Que ve el azul de la piscina allí abajo y que no solo tiene que tirarse. No. La dificultad del partido de hoy, en cancha rival y con el equipo diezmado por las lesiones, es como intentar hacer un triple mortal hacia atrás con carpado y tirabuzón. Ni más ni menos.

Aunque Svetislav Pesic pensara en dejar a dos jugadores -elijan ustedes mismos qué dos- sin jugar para igualar las cosas, el Delteco lo seguiría teniendo casi imposible.

Es cierto que venció con las bajas de Norel y Oroz en Tenerife. Bueno, no solo eso. Ganó después de remontar 22 puntos en dieciocho minutos y medio. Una hazaña. Y que con solo un entrenamiento le hizo hincar la rodilla al Obradoiro en la prórroga sin el concurso de su mejor jugador. Sin embargo, el reto de hoy es varios peldaños superior.

Quizá estemos a las puertas de otra lección por parte del conjunto guipuzcoano. La verdad es que sería la cuadratura del círculo. No solo si gana, con pelear de tú a tú contra el gigante azulgrana sería suficiente. No sería un triunfo palpable. Sí intangible. Sería dar un triple mortal desde diez metros.

Como ocurriera en las dos últimas jornadas, Porfi Fisac y sus ayudantes deberán dirigir con la escuadra y el cartabón. Midiendo esfuerzos, resguardando a los jugadores con faltas e intentando minimizar lo más posible el talento blaugrana que, por cierto, rebosa en todas sus líneas.

Lo que tiene entre manos el de Fuenterrebollo son los nueve de arriba. Sí, los que salen en la foto. Nueve hombres y un destino. El mítico Palau que espera, sin la gloria de otrora, todo hay que decirlo, pero imponente ante cualquiera. Y más para un equipo como el donostiarra. De los nueve jugadores, solo uno, Daniel Clark, tiene más de cien partidos en la ACB. De hecho hay un curioso dato. La suma de todos los partidos que han disputado los jugadores que viajaron ayer hasta Barcelona, es menor que los encuentros que ha disputado Juan Carlos Navarro. No crean que por exigua diferencia. El astro de Sant Feliu ha disputado 680 encuentros. Todos los jugadores del Delteco GBC 580. Ahí es nada. Solo Navarro tiene cien partidos mas que la expedición donostiarra. Un simple ejemplo de la desigualdad que puede haber este mediodía en el parqué del Palau.

¿Qué Barcelona se encontrará la escuadra de Fisac? El equipo que cayó ante el Estudiantes o el que le endosó sesenta puntos de diferencia al Betis hace apenas una semana. Muchos entrenadores coinciden, Fisac también, en que un resultado ante los grandes depende absolutamente de lo que haga el equipo de mayor potencial. Hoy también será así. Si Heurtel ve el baloncesto fácil, Koponen tiene el punto de mira listo, Oriola es una máquina de defender y Tomic no perdona desde dentro, al Delteco no le quedará otra que sacar el paraguas y aguantar el chaparrón. Pero este equipo ha ido dando lecciones allá por donde ha pasado. Quizá hoy sea otra más. y sería para enmarcarla.