Irak vive su drama más surrealista sobre el verde: Su goleador es expulsado por 'comer hierba' y le remontan en el minuto 97

De la celebración al drama en apenas 20 minutos. La selección de fútbol de Irak ha escrito este lunes una de las páginas más surrealistas de la historia del deporte. Con un país volcado con una selección que estaba siendo la revelación de la Copa de Asia, el combinado dirigido por el español Jesús Casas ha quedado apeado en los octavos de final tras caer por 2 goles a 3 ante Jordania tras una concatenación de acontecimientos absolutamente dramáticos.

Irak llegaba a octavos de final del torneo que se está celebrando en Qatar con pleno de victorias y mostrando un juego que daba derecho a soñar a los vecinos de un país unido por el fútbol. Incluso se impusieron en la fase de grupos a la imponente selección de Japón, en la que juega el realista Take Kubo. Todo apuntaba, por tanto, a que Jordania sería un rival asequible para seguir en el camino hacia un título que ya logró en 2007. Pero una sucesión de situaciones, no exentas de su dosis de surrealismo, han precipitado el adiós del combinado del Golfo.

El partido discurría bastante parejo. El gol de Jordania al filo del descanso les ponía en ventaja, aunque la posesión era dominada por el combinado iraquí. Las ocasiones se sucedieron al comienzo de las segunda mitad y la igualada llegó en el minuto 68 a cargo de Suad Natiq. Y la explosión de felicilidad ha terminado de concretarse en el minuto 76 por el tanto logrado por Aymed Hussein.

El delantero marcaba así su sexto gol en el torneo y culminaba una remontada que celebraba buena parte del estado y las calles de media Irak. Los jugadores hacían su piña, Hussein hacía un gesto, otro, uno más a las gradas y cuando volvía hacia su campo se sentaba en el campo y hacia como que comía algo del suelo.

Alertado por la presencia del árbitro, un compañero de Hussein le ha pedido que se levantase, pero nada más ponerse de pie llegaba el colegiado Alireza Faghani y le mostraba la tarjeta amarilla por celebrar «en exceso» el gol. Una amarilla que suponía la segunda y la consiguiente expulsión de la estrella de Irak.

Irak se quedaba en ventaja a falta de un cuarto de hora para el final del partido, pero con 10 hombres sobre el verde. Desde ese momento, Jordania ha iniciado su asedio a la meta de Hachim, que parecía resistir hasta que ha llegado el descuento. Dos golpes consecutivos en el minuto 95 y en el 97 han dejado sin respuesta a los de Jesús Casas, que se han despedido el octavos de final de la Copa de Asia. Un drama nacional para una selección que aspiraba a todo en el torneo.

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