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Lluvias intermitentes acompañan al paso del Tour por Gipuzkoa

Vitoria-Gasteiz ha amanecido este domingo con un tiempo agradable y soleado para la salida de la segunda etapa del Tour de Francia, pero el recorrido que los ciclistas iban a realizar por territorio guipuzcoano esperaba ser pasado por agua. El ligero sirimiri que desde primeras horas de la mañana ha estado cayendo en la costa ha respetado a los corredores a lo largo de sus tramos de interior, a través de la comarca del Alto Deba y de Tolosaldea. Ha sido en Tolosa cuando las primeras gotas han vuelto a hacer acto de presencia, para dar un nuevo respiro en la subida a Alkiza. Sin embargo, y aunque la previsión es que a medida que se acercaran a la meta del Boulevard donostiarra las lluvias iban a regresar, finalmente el tiempo a respetado el final de etapa.

«Va a seguir lloviendo, al menos hasta las 17.00 horas, por las nubes que están entrando desde el mar», aseguraba la delegada de Aemet en el País Vasco Margarita Martín. «A partir de entonces es más fácil que deje de llover, pero tampoco es seguro. Están siendo lluvias débiles e intermitentes porque no dejan de venir bandas y bandas de sirimiri». De esta forma, con una llegada a meta pronosticada sobre las 17.16 horas, parece que el tiempo finalmente respetó la entrada del ganador de esta segunda etapa, incluso durante la exigente subida al Alto de Jaizkibel que sí mostraba su asfalto mojado.

Así, los paraguas y chubasqueros no han coloreado el paisaje de los aficionados que han disfrutado a pie de calle del paso de la carrera en esos últimos 20 kilómetros desde Hondarribia a la capital guipuzcoana, que sí se hicieron notar a primeras horas en la vertiente cantábrica. Una jornada que ha sido nubosa, con temperaturas templadas que apenas están superando los 21 grados y que, según el pronóstico, continuará abriéndose hacia media tarde.

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