Meredith brilla en Jaizkibel

El triunfo es un espaldarazo para el proyecto del Eulen, que lleva adelante el club Jira-Bira zarauztarra. Después de dos temporadas sin victorias del equipo masculino (Maite Urteaga le ha dado varios triunfos al equipo en este tiempo), ganar en el estreno de la Vuelta al Bidasoa es un premio gordo. Meredith es un ciclista de 27 años –disputa la carrera porque este año ha cambiado el reglamento y se permite un ciclista élite por equipo–, natural de Colchester y que ha fichado por el Eulen esta temporada.

Su llegada a Zarautz se fraguó por medio de un amigo de los rectores del equipo, que les puso sobre la pista de un ciclista con grandes números pero que había pasado un calvario los últimos cuatro años, por el Covid y por varias caídas. Meredith envió sus datos y transmitió que se planteaba esta año como un «ahora o nunca».

Su victoria no es una sorpresa, ya que esta temporada había sido segundo en la Vuelta a Extremadura, tercero en Ereño, noveno en Gorla y fue cazado a 300 metros de la meta de Zumaia. Estaba en las quinielas. Destaca por ser «muy profesional, muy serio», afirman en el equipo, que tiene a tres ciclistas de primer año en la carrera. Su preparador físico pertenece a la estructura del EF del World Tour. Se da la circunstancia de que, tras su buen inicio de año, recientemente regresó a Inglaterra y se puso en manos de un nutricionista. Se presentó en la salida de la Vuelta al Bidasoa con tres kilos menos de los que se fue.

Este viernes, en la segunda etapa entre Irurita y Bera sobre 140 kilómetros, será el objetivo de todos los equipos fuertes, «que nos van a dar por todos los lados, pero estamos para esto y los chavales están con la moral por las nubes», explica Ismael Etxarri, responsable del Eulen. Meredith destaca por sus dotes de escalador y esta segunda etapa de puede ser la más difícil para él.