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MIKEL GARCÍA
GETXO.
Martes, 1 de agosto 2017, 07:08
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En un día oscuro y marcado por la lluvia, brilló con luz propia Carlos Barbero en la meta del Circuito de Getxo. El corredor del Movistar era la punta de lanza de un conjunto que partía con la obligación de llevarse el triunfo dada su condición de único equipo World Tour, con la responsabilidad que ello conlleva. Una losa más con la que pedalear. Toda la presión para los ocho hombres que dirigía Pablo Lastras, y entre los que se incluía el ídolo local Jonathan Castroviejo. La carrera, como era de esperar, se iba a decidir en la subida final al repecho de 'Txomintxu'.
Y en esas surgió la figura de Barbero, ganador en 2014 con el equipo Caja Rural, que no falló. Vigiló la rueda de otro de los favoritos, el cántabro del Delko Marseille, Ángel Madrazo, y arrancó para llegar con el margen suficiente para alzar los brazos. La presión de ganar se esfumó nada más cruzar la línea de meta. Objetivo conseguido. Nada más cruzar la meta se apeó de su bicicleta y se abrazó a su auxiliar. Después tomó dirección a la línea de meta buscando a Castroviejo, con el que se fundió en un emotivo abrazo.
Dos segundos después del vencedor cruzaba la meta Madrazo, derrotado. Pero sin abandonar esa sonrisa en su rostro que tanto le caracteriza. No tardó en acercarse a Barbero para felicitarle. Tercero fue otro Movistar, José Herrada, que demostró la superioridad del equipo telefónico. Rozando el podio se quedó Egoitz Fernández. El ciclista del conjunto japonés Team Ukyo se sobrepuso a un pinchazo en la penúltima vuelta pero no pudo redondear su actuación como mejor vasco con el podio.
La ambición de Movistar hizo que hasta el final de la prueba el conjunto telefónico controlase la carrera para Barbero. El Delko Marseille trató de dar la sorpresa, pero era tremendamente complicado viendo la implicación que mostraba Movistar. Los franceses lo probaron con Daniel Díaz, pero el control de por parte de los primeros fue absoluto.
Barbero dedicó el triunfo a Valverde, su compañero y uno de sus referentes. «Le echamos mucho en falta, esperamos que vuelva cuanto antes porque es el referente de nuestro equipo». El ciclista agradeció la labor de sus compañeros que estuvieron «controlando todo para que no fuera una carrera loca como sucedió el año pasado y pudiera llegar al sprint, que era al objetivo». Sobre el cambio de ritmo en 'Txomintxu' que le permitió la victoria, Barbero explicó que «Madrazo ha arrancado, le he cogido la rueda y luego he buscado mi distancia para remacharlo».
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