El Bidasoa Irun, a sellar el pasaporte para octavos de final

Un buen arranque de competición, con tres victorias en las cinco primeras jornadas y un empate en la sexta, dejó al equipo amarillo muy bien situado para pasar a la siguiente fase, pero la clasificación se está haciendo esperar. Puntuando este martes contra el Motor Zaporozhye (18.45 horas, ETB4 y DAZN) llegaría el premio. Incluso habría calsificación matemática perdiendo, pero si se dan los resultados deseados en los otros dos partidos del grupo D, en los que cuarto y quinto visitan a primero y segundo, respectivamente.

El Bidasoa Irun no se fía del colista por dos motivos. Por un lado, por la mejoría que ha mostrado en el 2023, en el que ha ganado dos partidos de tres en la segunda división alemana, saliendo de la zona peligrosa. Por otro, el recuerdo del partido de Artaleku, que tuvo final feliz (26-22) pero iba 9-12 al descanso.

Jacobo Cuétara, que cuenta con los catorce hombres de la primera plantilla y ha completado la convocatoria con los jóvenes, Gorka Nieto y Eneko Furundarena, recuerda que «fue un partido incómodo para nosotros hasta que en el arranque del segundo tiempo conseguimos una ventaja. Y hoy será más difícil».

Avisa de que el Motor Zaporozhye «está yendo más, cada vez está compitiendo mejor. En liga europea estuvieron a punto de ganar en Dinamarca, con lo difícil que es eso». Explica que su rival es «un equipo con mucho poder ofensivo, mucho poder físico, que a nosotros nos costó mucho atacarles aquí, sobre todo en la primera parte, en la que solo metimos nueve goles. Tienen ese poder físico y una gran capacidad de lanzamiento exterior. Es un equipo muy europeo y que aquí nos costó mucho ganarle».

El asturiano considera «importante que confiemos en nosotros y que demos fuera de casa el nivel que estamos demostrando en Artaleku». Y subraya que «en casa no es solo que ganamos casi todo, sino que estamos teniendo resultado más o menos cómodos, algo que es muy complicado de conseguir en la liga Asobal».

Como prueba, el 38-30 del pasado viernes ante el Torrelavega, con un 23-15 al descanso. «Además del resultado, abultado, estamos muy contentos por el cómo, con mucha confianza». Y espera que esta victoria, ante el cuarto clasificado, «nos sirva ahora para ser competitivos fuera de casa, que es lo siguiente que tenemos que hacer».

El entrenador de Ribadesella ha viajado a Dusseldorf «pensando en ganar y así dar ese pasito que nos queda para clasificarnos matemáticamente. Sería algo de mérito, estar entre los mejores de la competición, estar en octavos de final, donde hay tantos equipos que no llegan, además con el éxito anterior de haber eliminado al Kolstad en la previa».